El país celebra comicios locales este domingo, pero la oposición esta decidida a boicotearlos y el presidente demanda que se atrasen
PUBLICIDADClima tenso en las elecciones locales de Albania. Cientos de opositores salieron a las calles en febrero para pedir la dimisión del primer ministro, Edi Rama. Le acusaban de fraude electoral en 2017 y de tener vínculos con el crimen organizado basándose en una investigación del diario alemán Bild.
Los comicios están previstos para este domingo, pero los detractores de Rama están dispuestos a boicotearlos si no se produce una salida del mandatario. Las protestas comenzaron hace cuatro meses y este jueves tres policías resultaron heridos en el norte del país cuando varias personas asaltaron un centro electoral y utilizaron cócteles molotov.
Para aumentar la confusión, el presidente Ilir Meta, ha cancelado las elecciones después de que la oposición anunciara que no participaría en ellas, ha propuesto el trece de octubre como nueva fecha y ha pedido a los partidos políticos que inicien un diálogo. La decisión ha sido revocada por Comisión Electoral Central y el Colegio Electoral, que mantienen el llamamiento a las urnas para este domingo. Además, es necesario que la propuesta del jefe de Estado sea aprobada por el Tribunal Constitucional, inactivo desde hace meses por falta de jueces.
Rama, líder del partido socialista, está decidido a que se vote esta semana y ha desoído las demandas de sus oponentes. En 31 de los 61 ayuntamientos del país, que cuenta con menos de tres millones de habitantes, su partido se presentará solo.
La comunidad internacional ha condenado la violencia de los opositores, pero sin referirse a la controversia sobre la fecha de las elecciones. La Junta Electoral Central ha aceptado a observadores de las embajadas de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania e Italia, además de la OSCE. La coyuntura actual es también un revés para las aspiraciones de Albania de entrar en la Unión Europea. A finales de mayo, la Comisión recomendó avanzar en las negociaciones pero, en vista de lo que está ocurriendo, varios países abogaron por echar el freno a mediados de este mes.