Los votantes podrían apostar por la continuidad en Austria pese a la corrupción

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Corta e intensa campaña electoral en Austria. El denominado 'escándalo de Ibiza' provocó la destitución del Gobierno de Sebastian Kurz y desembocó en nuevas elecciones en septiembre. La corrupción es uno de los temas que más preocupan a los ciudadanos. Una cuestión candente incluso en el festival de danza vienés Impulstanz, cuyo director es muy crítico con el antiguo Ejecutivo.

"Me sorprendió mucho que durante nuestro último Gobierno no se tuviese más firmeza con el comportamiento y las ideas promulgadas por los partidos de corte ultranacionalista", declara Karl Regensburger, director del festival de danza Impulstanz.

La primera reprentación de Macbeth, trata del asunto Barschel alemán que tuvo lugar en los años ochenta. En el festival de danza contemporánea más grande de Europa, Regensburger traza paralelismos con la política actual en Austria.

"Realmente es increíble que todo el mundo pueda ver la corrupción pero, aún así, los políticos se vuelven más populares entre los votantes", añade Karl Regensburger.

Hoy día, el panorama artístico vienés es pesimista en lo que respecta a las próximas elecciones.

"Espero que esta vez nos vaya mejor que en los últimos comicios".

"Tengo la sensación de que, de alguna manera, es un círculo vicioso, que va a girar de una manera, después lo hará de otra manera, y más tarde será un gran escándalo de nuevo. Me temo que no habrá cambios duraderos".

"El llamado 'escándalo de Ibiza' ha hecho caer al gobierno de Sebastian Kurz. Pero poco ha cambiado en las encuestas. Es probable que vuelva a ser canciller, su partido tiene una ventaja de más del 15 %. El Partido de la Libertad, responsable del escándalo, ha sufrido muy pocos daños. Según las encuestas, estará justo detrás de los socialdemócratas, en tercer lugar", concluye Johannes Pleschberger, corresponsal de Euronews en Viena.