Rusia respalda a Cuba sin aclarar si aportará más crudo a la isla. En plena crisis energética, Díaz-Canel ha recibido en La Habana al primer ministro ruso Dmitri Medvédev. Moscú reafirma su apoyo, pero no menciona si aportará petróleo adicional a la isla
PUBLICIDADRusia cierra filas con Cuba, aunque no aclara si paliará la grave crisis energética que sufre la isla.
El primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, reafirmó este jueves en La Habana el apoyo de Moscú al gobierno de Miguel Díaz-Canel, en plena fase de tensión con Estados Unidos.
Los dos mandatarios se reunieron durante dos horas en el emblemático Palacio de la Revolución y acordaron reforzar su asociación estratégica, a través de una serie de acuerdos por los que Rusia apoyará proyectos en materia de energía, agricultura, tecnología y desarrollo digital.
En los discursos se repitieron las críticas al bloqueo estadounidense, pero no se escuchó ni una palabra sobre si Moscú aportará a corto plazo petróleo adicional para aliviar la grave carencia de combustible que padece Cuba.
"Estados Unidos trata de crear un ambiente tóxico en la cooperación con Cuba", dice Medvedev
"No todo el mundo ve con buenos ojos este diálogo -subrayó Medvedev durante la rueda de prensa-. En los últimos meses, Estados Unidos ha intensificado significativamente el bloqueo económico contra Cuba. Está claro que quieren crear un ambiente tóxico cuando se trata de cooperar con la isla, asustar a los socios económicos y crear un bloqueo energético".
Díaz-Canel asegura que las relaciones con Rusia continuarán fortaleciéndose
"Estamos seguros de que en el complejo escenario internaciona actual las relaciones entre la república de Cuba y la Federación de Rusia continuarán fortaleciéndose para el beneficio mutuo de nuestros pueblos y gobiernos", señaló el presidente cubano.
Cuba deshoja la margarita rusa
Cuba vive una de sus peores crisis energéticas. La isla se ha quedado sin petróleo, debido a la situación en Venezuela, que ha recortado drásticamente los envíos de crudo, pero, sobre todo, debido al endurecimiento del bloqueo estadounidense que impide llegar buques petroleros al país.
En su búsqueda de proveedores alternativos de combustible, Cuba pactó con Rusia envíos de petróleo y diesel que permitieron paliar la situación el año pasado. Ahora, con la isla tirando de caballos y arados por falta de combustible, La Habana espera ahora que Moscú vuelva a ser su tabla de salvación.