El largo juicio contra el partido neonazi griego Amanecer Dorado se acerca a su fin y vive, este miércoles, un momento clave. Testifica por primera vez ante el tribunal su dirigente y fundador, Nikos Michaloliakos, de 61 años, que califica el juicio de "complot político".
El largo juicio contra el partido neonazi griego Amanecer Dorado se acerca a su fin y vive, este miércoles, un momento clave. En los cuatro años desde que comenzó el proceso, es la primera vez que testifica ante el tribunal su dirigente y fundador, Nikos Michaloliakos, de 61 años, que califica el juicio de "complot político".
El líder de Amanecer Dorado es uno de los casi 70 acusados, que se enfrentan a penas de entre cinco a 20 años de cárcel. Se le acusa de "constituir una organización criminal" y de "instigación moral" del asesinato del rapero antifascista Pavlos Fyssas, de 34 años, apuñalado por un miembro del partido en 2013.
Cuatro años de juicio
El juicio ha durado cuatro años debido a la gran cantidad de acusados y testigos. Pero sea cual sea el veredicto, los analistas consideran que el partido ya está sentenciado, sin electores, expulsado de los círculos políticos y mediáticos y arruinado.
De tercera fuerza política a su derrumbe
Amanecer Dorado defiende una ideología neonazi, xenófoba y antisemita. En 2012, aprovechando la crisis económica, la llegada masiva de inmigrantes y el descontento con la clase política, consiguió entrar en el Parlamento griego, logrando 18 diputados. En 2015, se convirtió en la tercera fuerza política en Grecia.
Durante 2012 y 2013, los escuadrones de ataque de Amanecer Dorado deambularon por las calles griegas, atacando a migrantes, opositores políticos, homosexuales y antifascistas.
El asesinato del rapero antifascista lo cambió todo, provocando su declive gradual.
Hoy por hoy, el partido neonazi griego no tiene ni para pagar el alquiler. El pasado septiembre se veía obligado a cerrar su principal sede en Atenas.