Esta vez, se han visto afectados sobre todo los viajes cortos de fin de semana. Turistas y comerciantes tenía que organizar sus vidas con bastante antelación ante el caos en las redes de transporte.
PUBLICIDADFrancia continúa paralizada en su tercer día de huelga nacional. Se mantiene el pulso contra la reforma del Gobierno que pretende rediseñar el sistema de pensiones. Esta vez, se han visto afectados los viajes cortos de fin de semana. La mayoría de trenes no circulan. Turistas y comerciantes tenía que organizar sus vidas con bastante antelación ante el caos en las redes de transporte. Según la asociación de pequeños minoristas francesa, este año está siendo muy difícil para los pequeños comercios debido a las continuas movilizaciones. Mientras que la federación de hosteleros GNI, apunta que las reservas han caído entre un 30 y 40% en ciudades como París o Lyon.
"El derecho a la huelga es un derecho adquirido y totalmente normal, pero para nosotros, los trabajadores, nos lleva a hacer malabares. Ayer, me llevó tres horas ir a casa, así que es difícil cuando tienes que trabajar y añadir tres horas de transporte con todas estas dificultades", apunta una de las trabajadoras que no hace huelga
"La cuestión de las pensiones también está sobre la mesa en Alemania cada cierto tiempo. Así que sí, es un problema. Si no se resuelve bien, te manifiestas. Eso es democracia. Eso es lo que se hace", señala un turista alemán.
"No tenemos este tipo de huelgas en nuestro país. No tenemos a los viajeros como rehenes. Es bastante desagradable, diría yo. Pero volveremos aquí de todos modos, porque nos encanta Francia", destaca otra turista procedente de Canadá.
Por su parte, el Ejecutivo no da marcha atrás. Habrá nuevas reuniones entre el Ejecutivo y los actores sociales este lunes. El martes los sindicatos prevén intensificar las movilizaciones.
En esta ocasión no hay supresiones de vuelos. Como viene ocurriendo desde el jueves, no circula ningún tren entre Francia y España o entre Francia e Italia, y entre Francia y Alemania únicamente uno de ida y vuelta entre París y Stuttgart, indica la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) en un comunicado.