El Parlamente indio aprueba la polémica ley de ciudadanía para inmigrantes, pese a las fuertes protestas. Ésta otorga la ciudadanía india a los migrantes venidos de Pakistán, Bangladés y Afganistán, pero solo si no son musulmanes.
El Parlamente indio ha aprobado la polémica ley de ciudadanía para inmigrantes, pese a las fuertes protestas. Ésta otorga la ciudadanía india a los migrantes venidos de Pakistán, Bangladés y Afganistán, pero solo si no son musulmanes.
El Gobierno indio asegura que la ley responde a la necesidad de acoger a las minorías religiosas, víctimas de persecuciones en los países vecinos de mayoría musulmana.
Sin embargo, sus detractores consideran el texto discriminatorio y anticonstitucional. Varios partidos de oposición denuncian que la norma va en contra de la fundación laica de la India, al vincular la ciudadanía con la religión.
Mientras se debatía el proyecto de ley, estallaron protestas en el estado de Assam, en el noreste de la India. Sus habitantes temen una avalancha de extranjeros.
Las redes de telecomunicaciones e Internet han sido bloqueadas por las autoridades y se ha impuesto el toque de queda en la capital, Guwahati. El Ejército está en alerta para intervenir en caso de que la violencia se intensifique.