Decenas de muertos y heridos en un ataque estadounidense contra milicias proiraníes en Siria e Irak
La tensión entre Estados Unidos e Irán cambia de escenario y se traslada desde las aguas del Golfo Pérsico a las áridas tierras del oeste de Irak y del este de Siria... Allí han muerto, según las fuentes, entre 19 y 25 milicianos proiraníes en un ataque estadounidense contra cinco objetivos ligados a Kata'ib Hezbollah, acciones que han dejado además decenas de heridos.
El Pentágono responsabiliza a este grupo apoyado, financiado y entrenado por Teherán del bombardeó contra una base militar cerca de Kirkuk que mató el pasado sábado a un contratista norteamericano.
Ante la prensa, el Jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, explicaba:
"Su ataque no fue el primero que ponía en riesgo vidas estadounidenses. La respuesta determinada que hemos dado hoy deja en claro lo que el presidente Trump ha dicho durante meses: no toleraremos que la República Islámica de Irán tome medidas que pongan en peligro a los hombres y mujeres estadounidenses".
Según Teherán, Estados Unidos ha demostrado al mundo que apoya "al terrorismo" por atacar a fuerzas que luchan contra el grupo yihadista Estado Islámico.