Miembros de la radiotelevisión estatal explican a euronews por qué se han rebelado contra el poder del Lukashenko.
PUBLICIDADContinúa la huelga en la entrada del grupo de radiotelevisión estatal Belteleradio (BTRK) en Minsk por tercer día. Docenas de trabajadores de los medios estatales exigen una cobertura honesta de las protestas bielorrusas.
"Todos queremos mostrar información objetiva. Queremos que nuestras noticias sean verdaderas, que muestren esas cosas terribles que están sucediendo. Cobertura de lo que realmente es, y no hechos falsos", explicó uno de los manifestantes, la directora y presentadora de televisión Natalia Bibikova. "Queremos trabajar, pero queremos trabajar en televisión honesta, normal. Y esperamos que cada día seamos más y logremos nuestro objetivo" dijo a euronews. "Hay muchos servicios diferentes en huelga, administrativos, presentadores, camarógrafos y personal técnico" añade. "No estoy preocupada por mi trabajo. Hay gente muriendo y sería muy extraño preocuparse por perder el trabajo ahora" dice.
Explica que seguirán hasta que sea necesario. "Vamos a aguantar hasta el final. Los que estamos aquí no tenemos miedo a ser despedidos".
Bibikova precisa que sigue habiendo suficiente personal trabajando para mantener la antena "pero algunos programas ya no están en el aire porque los directores o técnicos de luces están en huelga, es simplemente magnífico".
Según los periodistas, las huelgas fueron desencadenadas por protestas masivas que terminaron con las brutales detenciones de miles de manifestantes pacíficos el 9 y 10 de agosto.
Durante estos días, muchas publicaciones bielorrusas internacionales e independientes transmitieron los eventos en vivo. La red de transmisión de los medios estatales no ha cambiado su cobertura tradicional.
"En los medios estatales la información sobre las protestas se dio de la manera habitual: calificando a los manifestantes de sinvergüenzas, criminales, provocadores que salieron a arrojar piedras y trozos de pavimento a la pobre policía antidisturbios", dijo a Euronews Boris Goretsky, vicepresidente de la Asociación de Periodistas de Bielorrusia.
Goretsky señala que los medios estatales cometieron violaciones de la ética periodística incluso en el período anterior a las elecciones presidenciales. "La televisión bielorrusa destruyó sistemáticamente el honor y la dignidad de muchos participantes en la campaña electoral", subrayó el experto.
"Es obvio que muchos periodistas del estado ya han decidido cubrir los eventos de manera veraz. comenta. "La semana pasada, una docena y media de empleados de varios medios estatales anunciaron su renuncia. Estos son algunos de los principales presentadores, un empleado es incluso considerado el jefe del organo presidencial - Dmitri Semchenko, un periodista del canal de televisión ONT. Muchos ya han decidido no participar en esta propaganda. Es una dinámica que se ha establecido".
"No quería decirle eso a la gente con mi boca y no puedo".
El 15 de agosto, cerca de mil personas se reunieron en el edificio de la BTRK con pancartas: "¡Deja de mentir!", "¡Dile a la gente la verdad!" y "¡Muéstrale a Akrestsin!" (el pabellón de aislamiento donde se encuentran los detenidos durante las manifestaciones).
Hubo informes de que los empleados de los canales estatales estaban preparando una huelga.
El mismo día, Belteleradio organizó una reunión a puerta cerrada de periodistas con la secretaria de prensa de la presidenta bielorrusa Natalya Eismont y la presidenta de la cámara alta del parlamento Natalya Kochanova, que, según los participantes, "no condujo a ninguna parte".
La semana pasada, varios conocidos presentadores bielorrusos de la televisión estatal anunciaron su dimisión.
En los medios de comunicación apareció información no confirmada de que el jefe del grupo presidencial de periodistas Dmitry Semchenko también abandonó el canal de televisión ONT. El despido fue anunciado no solo por los corresponsales de noticias, sino también por los empleados de la cadena de radio de entretenimiento.
Después de que los presentadores Anna Shalyutina y Dmitry Shunin dejaron ONT, así como algunos de los editores y trabajadores técnicos, el programa matutino "Nuestra Mañana" se fue de vacaciones.
"Fue una decisión absolutamente independiente de un adulto que se dio cuenta de que su visión de lo que está sucediendo en el país es directamente opuesta a la que se cubre en los canales de televisión", dijo Shalyutina a Euronews.
"No trabajo para las noticias, trabajo en entretenimiento, soy un 'payaso', pero, en primer lugar, no es un momento para divertirse y, en segundo lugar, las emisiones de entretenimiento eran cada vez más similares a la cobertura social y lo política".
"Personalmente, no quería decirle a la gente todo eso con mi boca y no puedo", agregó. "La gente que eligió la profesión de periodista no lo hace para contar mentiras. Los camarógrafos no fueron a filmar mentiras. Además, los empleados de la ONT no están protegidos. Cuando caminan por la calle, también quedan atrapados en las manifestaciones".
PUBLICIDADLa víspera, el ministro de Información de la República, Igor Lutsky, dijo que la televisión bielorrusa funciona como de costumbre, a pesar de la huelga.
