La fiesta del cine, enmascarada. Así ha llegado, con una mascarilla, la actriz Cate Blanchett a Venecia para presidir la 77ª edición del famoso Festival de Cine de esta ciudad italiana, que ha comenzado este miércoles en medio de estrictas medidas de seguridad sanitaria y con un número reducido...
PUBLICIDADLa fiesta del cine, enmascarada. Así ha llegado, con una mascarilla, la actriz Cate Blanchett a Venecia para presidir la 77ª edición del famoso Festival de Cine de esta ciudad italiana, que ha comenzado este miércoles en medio de estrictas medidas de seguridad sanitaria y con un número reducido de participantes. El mismo atrezo han lucido todos los recién llegados a un certamen que marca el inicio del difícil regreso de los eventos culturales al Viejo Continente.
"Tenemos que salir de casa, tenemos que ir al cine, tenemos que volver a hacer buenas películas. El cine no puede permitirse el lujo de ser bloqueado por el virus durante mucho tiempo. Hay que volver a empezar con todas las medidas de seguridad necesarias e indispensables, pero se puede hacer. Espero que este festival demuestre que podemos volver a organizar grandes eventos e ir al cine sin correr ningún riesgo", afirmaba el cineasta Alberto Babera.
Sesenta y cinco películas de 50 países distintos se presentarán en esta edición de la Mostra, aunque solo 18 competirán por el prestigioso León de Oro. En lo que se refiere a la asistencia de público, el aforo está muy reducido debido a las medidas de distanciamiento social. Para evitar multitudes, un muro gris oculta la alfombra roja por la que desfilarán directores y artistas.