Los globos participantes se han reducido a la mitad y solo cientos de personas han podido verlo in situ por la pandemia. Pero la alegría y el color en el cielo mexicano ha sido el de siempre.
Cien globos aerostáticos han llenado de color estos días el cielo de la ciudad de León, en el estado mexicano de Guanajato.
Desde Bob Esponja a la gallina Pintadita, participaban en el Festival Internacional del Globo en una edición diferente. La pandemia ha obligado a reducir a la mitad el número de aparatos. Y a que el medio millón de espectadores habituales que lo contemplan in situ se quedara en esta edición en solo unos cientos.
"Diferente, obviamente, sin personas. Muy tranquilo, pero la vibra y la energía de los globos es la misma que cada año", asegura una afortunada espectadora.
Por supuesto, los fans han podido seguir de día o de noche este espectacular despliegue en directo por internet, esperando que el año que viene todo vuelva a ser como antes.