Una masa de aire polar y la borrasca Filomena han creado la tormenta (de nieve) perfecta. Se esperan acumulaciones de nieve históricas en gran parte de España hasta el domingo.
PUBLICIDADSi es verdad el dicho popular "Año de nieves, año de bienes", todo va a salir muy bien este 2021 en España. Con buena parte de Europa bajo un frente de frío polar, la borrasca Filomena, la sexta con nombre de la temporada, va a dejar precipitaciones de nieve históricas en buena parte del país.
La Agencia Estatal de Meteorología AEMET ha emitido un aviso especial y pone en alerta roja casi todo el centro de la Península. En muchas de estas zonas nunca se había activado la alerta roja por nevadas. A pesar de que el país lleva varios días recibiendo nevadas y se acaba de batir el récord de la temperatura más baja jamás registrada -35,8º C en León- lo más intenso está por llegar.
Se esperan acumulaciones de nieve de hasta 50 centímetros en zonas de Castilla la Mancha y de unos 40 cm en Madrid. También se prevén ventiscas fuertes que pueden complicar la situación. El Mediterráneo está en alerta por fenómenos costeros y hay varias zonas en alerta amarilla por temperaturas bajas.
Protección Civil pide que se eviten los desplazamientos innecesarios.
La borrasca Filomena trae lluvia, viento y nieve a toda la Península.
Canarias no se ha librado y ha tenido temporal con lluvias, vientos de hasta 80 km/ h y 100km/ h en zonas altas y oleaje de cinco metros. La situación comienza a mejorar en las islas.
En Andalucía se intensificarán las lluvias que ya estaban siendo persistentes en los últimos días. Y conforme avance hacia el noreste, la borrasca Filomena dejará históricas precipitaciones de nieve en Castilla La Mancha, Castilla y León, Cáceres, Madrid, La Rioja, Murcia, Aragón y Cataluña, el sábado, y a la mitad norte de la península el domingo, excepto en Galicia y la costa del Cantábrico.
Además Filomena soplará vientos muy fuertes en el Mediterráneo que deteriorarán las condiciones marinas en toda la costa.
El temporal se debe al choque entre el aire muy húmedo y cálido que trae la borrasca desde el Atlántico con el aire frío polar instalado en Europa desde hace días.
Después del temporal, más frío
A partir del domingo las cosas se calmarán en cuanto a las precipitaciones, excepto en Andalucía, pero llegará -aún más- frío por lo que el manto de nieve será persistente.
¿Y el calentamiento global dónde quedó?
La doctora en Físicas y meteoróloga de Eltiempo.es Mar Gómez explica a euronews que este tipo de fenómenos no son incompatibles con la tendencia al calentamiento global.
De hecho, una de las teorías más extendidas apunta a que el cambio climático perturba la corriente de chorro, que regula la meteorología del hemisferio norte. Al provocar mayores ondulaciones (bajando más hacia el sur) y hacerla más lenta, puede provocar episodios de frío extremo en invierno, pero también más olas de calor y más intensas en verano.
Otra teoría de la agencia británica Met Office sin embargo apunta a que la corriente de chorro podría al contrario fortalecerse y desplazarse hacia los polos. "Si esto sucediera, el clima en gran parte de Europa, incluidos los países del norte, sería más suave y húmedo durante los meses de invierno. Sin embargo, los veranos podrían estar marcados por condiciones meteorológicas más secas y cálidas en algunos países".
En cualquier caso, por mucho calentamiento global que haya, nunca estamos a salvo de las fluctuaciones del tiempo. La meteoróloga explica con un símil que el clima es como la personalidad, más estable y el tiempo meteorológico como el humor, que puede cambiar -varias veces- cada día.