Tras varias horas detenida, la esposa del líder opositor, Yulia Navalnaya, fue liberada por las autoridades policiales. Navalnaya fue arrestada por participar en la manifestación de Moscú. Otros miles no han tenido la misma suerte.
PUBLICIDADDecenas de miles de personas salieron a protestar en Rusia para exigir la liberación de Alexéi Navalni que se encuentra en prisión preventiva desde principios de semana. Nuestra periodista, Galina Polonskaya, nos detalla desde Moscú que las temperaturas de hasta -50 grados no enfriaron los ánimos en la jornada de este sábado.
"Personas de más de 90 ciudades de toda Rusia salieron a las calles a apoyar a Alexéi Navalni. Previamente, el Kremlin había advertido que las manifestaciones no autorizadas eran inaceptables. Aquí en Moscú, en la plaza Púshkinskaya, las detenciones comenzaron casi inmediatamente", relata Polonskaya.
Hasta el momento más de 2.000 personas han sido detenidas durante las manifestaciones, según datos del portal OVD-info, especializado en el seguimiento de detenciones en el país.
Tras varias horas detenida, la esposa de Navalni fue liberada, informaron las autoridades policiales. Yulia Navalnaya fue detenida por participar en la manifestación de Moscú. Ella había alertado de su detención a través de su cuenta de Instagram.
Ella y otros miles, exigen la liberación del opositor ruso y una investigación judicial transparente sobre su envenenamiento.
"¡La figura principal de esta manifestación es Alexéi Navalni! Ha arriesgado su vida y ha hecho mucho por nosotros. Creo que ya es hora de que hagamos algo por él y expresemos nuestra opinión sobre la justicia rusa y en lo que se ha convertido", señaló Аnna, una residente de la capital.
Junto a ella, Tatiana Voronina, otra ciudadana rusa, agrega que "Navalni llevó a cabo una investigación sobre su intento asesinato e identificó a los autores. Los asesinos son los agentes del Servicio Federal de Seguridad", aseguró, "y nuestras autoridades deberían haber iniciado un caso contra ellos y encarcelarlos. En cambio, en vez de intentar detener a los envenenadores, detuvieron a Navalni. ¡Es el colmo del cinismo!"
La respuesta de los seguidores de Navalni a la convocatoria fue mayor de lo esperado y superó, según cálculos del portal MBK-media, la cifra de 110.000 personas en toda Rusia.
Solo en Moscú participaron unos 4.000 ciudadanos, de acuerdo con el Ministerio del Interior y estimaciones de medios independientes. Una movilización que sobrevivió a la campaña de acoso que lanzaron las autoridades rusas lanzaron desde el jueves para descabezar al equipo de Navalni y el Fondo de Lucha contra la Corrupción (FBK) creado por él, con la detención de sus más estrechos aliados y colaboradores.
Navalni, que es acusado de haber violado los términos de una pena suspendida de 3,5 años de cárcel dictada en 2014 y declarada ilegal por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, asegura que el Gobierno ruso intenta silenciarle tras el intento de asesinato que sufrió el año pasado cuando fue envenenado por orden de Putin, según denuncia
La UE condena las detenciones y pide transparencia para el proceso de Navalni
El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, dijo este sábado "deplorar" las detenciones y "el uso desproporcionado de la fuerza" en las manifestaciones organizadas hoy en Rusia en apoyo al líder opositor, en prisión preventiva tras ser detenido a su regreso de Alemania, donde se había recuperado del envenenamiento que sufrió el año pasado.
"Siguiendo con preocupación los acontecimientos que se están desarrollando en Rusia. Deploro las detenciones generalizadas, el uso desproporcionado de la fuerza y los cortes en las conexiones a internet y telefónicas", escribió jefe de la diplomacia comunitaria en su perfil de la red social Twitter.
Añadió que los ministros de Exteriores de los Veintisiete debatirán "los próximos pasos" al respecto en la reunión que celebrarán el lunes. Sin embargo, en esa cita no se espera que aprueben nuevas sanciones contra Rusia, por la falta de unanimidad entre los países europeos.
Amnistía Internacional, que califica de "preso de conciencia" a Navalni, condenó la represión de las protestas y exigió la inmediata liberación de los manifestantes, al igual que la embajada de Estados Unidos en Rusia.