Según las nuevas estadísticas húngaras, la cantidad de consumo de alcohol aumentó un 75% en febrero y un 50% en marzo de 2020 con respecto al mismo periodo en 2019.
Las calles del llamado barrio de las fiestas están vacías en Budapest. Están cerrados los restaurantes y bares, que son populares no sólo entre los turistas sino también entre los residentes en tiempos "normales". Estos lugares estuvieron cerrados durante meses el año pasado, pero el gusto por el alcohol no disminuyó, al contrario...
Aunque los restaurantes y bares estuvieron cerrados durante la mayor parte de 2020, esto no significa que los húngaros bebieran menos. Según las nuevas estadísticas, la cantidad de consumo de alcohol aumentó un 75% en febrero y un 50% en marzo de 2020 con respecto al mismo periodo en 2019."
Hablamos con una psicóloga, que afirma que este fenómeno se explica por el hecho de que la gente se siente insegura debido a la situación de la pandemia. Como es muy impredecible lo que va a pasar, no tenemos ninguna influencia en la situación, lo que está provocando ansiedad. Por ello, la gente trata de calmar su ansiedad. Anna Zsófia Rácz destaca: "Aplicamos diferentes estrategias para hacer frente a la situación, esto difiere según el individuo, pero podemos dividirlas en dos categorías: el mecanismo de superación centrado en el propio problema y el mecanismo de superación centrado en las emociones. Quienes aplican el primero, suelen ser personas prácticas, que buscan soluciones y preparan un plan de acción. Quienes aplican el mecanismo que se centra en las emociones, intentan disminuir sus sentimientos negativos causados por el estrés. Hay métodos eficaces, como el humor, y menos eficaces, como el alcohol."
Esta situación puede añadir más presión a los adictos al alcohol, ya que su estrategia de superación es recurrir automáticamente al alcohol. No es el único país de Europa que está recurriendo al alcohol, en España por ejemplo, la venta de bebidas espirituosas se ha disparado un 27,5% según el Ministerio de Agricultura.