Europa sin carnaval. Uno de los más antiguos es el carnaval de la ciudad medieval de Binche, al sur de Bruselas, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco. Sus calles están llenas de tristeza.
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Las restricciones impuestas por el coronavirus han obligado a suspender una de las celebraciones más populares del calendario festivo en el Viejo Continente.
Uno de los más antiguos es el carnaval de la ciudad medieval de Binche, al sur de Bruselas (Bélgica), Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco. Sus calles están llenas de tristeza.
"De hecho, el carnaval de Binche es muy popular, y por eso es tan especial. Todos los habitantes de Binche viven el carnaval, participan. Así que si no hay carvanal, todos están tristes", explica Daniel Pourbaix desde la Asociación de defensa de las tradiciones de Binche.
Los trajes almacenados en los talleres de los artesanos son testigos mudos de un virus que sigue condicionando nuestras vidas. Para paliar las pérdidas han organizado una colecta popular.
De momento nada mejor que disfrutar de las imágenes de otros tiempos.