Esquerra Republicana que tiene la llave del futuro Gobierno catalán, reclama un referéndum. El efecto Illa no ha evitado que el bloque independentista salga reforzado de las urnas, con más del 50 % de los votos. VOX irrumpe como cuarta fuerza política
PUBLICIDADEl efecto Salvador Illa no consiguió frenar este domingo al bloque independentista en Cataluña, que sale reforzado de las urnas tras obtener más del 50 % de los votos.
El PSC, con el exministro de Sanidad al frente, fue el partido más votado y consigue 33 escaños. Los mismos que los independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya, que tienen la llave de un futuro Gobierno. Junts per Catalunya obtiene 32.
Aragonès: "Ha llegado la hora de negociar un referéndum de autodeterminación"
El candidato de ERC, Pere Aragonès, reclamó en la noche electoral apoyo a Europa para negociar un referéndum de autodeterminación.
"Me gustaría enviar un mensaje a las autoridades europeas. Los resultados son claros. Los partidos independentistas tenemos mayoría. Hemos alcanzado más del 50% del voto popular. El pueblo catalán ha hablado. Ha llegado el momento de negociar un referéndum de autodeterminación. Por favor, implíquense", dijo Aragonès.
Discurso similar el de la candidata de Junts per Catalunya, Laura Borràs. "Más del 55% de los escaños son independentistas, más del 50% de los votos son independentistas. Nunca hemos tenido unas bases tan sólidas para construir lo que el país nos pide que obtengamos juntos".
ERC, cuyo líder, Oriol Junqueras, es uno de los políticos presos que cumplen condena por secesión, puede negociar con JxCat, la formación impulsada por el expresidente catalán fugado a Bélgica, Carles Puigdemont (32 escaños) y la independentista radical CUP (9).
Pero las relaciones entre ellas, a pesar de compartir objetivo, no pasan por su mejor momento y no parece ser sencillo alcanzar un acuerdo.
VOX irrumpe como cuarta fuerza política, barriendo al PP y Ciudadanos
El partido ultraderechista VOX, inexistente hasta ahora en el panorama catalán, irrumpe como cuarta fuerza política, con 11 escaños, superando en ocho al Partido Popular y en cinco a Ciudadanos, en plena debacle.
Con estos resultados dos escenarios son posibles: un ejecutivo regional de signo independentista o una coalición de izquierdas y ambas opciones tienen a Esquerra como denominador común.
Unas elecciones de baja participación
Todo esto ha ocurrido en unas elecciones marcadas por una fuerte abstención debido al coronavirus. La participación fue de algo más del 53 %, la más baja en unas elecciones en Cataluña desde la recuperación de la democracia en España.
Más de cinco millones de catalanes estaban llamados a participar en unos comicios atípicos por la pandemia de coronavirus, que dejó imágenes inéditas debido a las medidas de seguridad que se tuvieron que adoptar.
Este porcentaje de participación supone 25,4 puntos menos que en las autonómicas de 2017, cuando la afluencia a las urnas alcanzó un récord del 79 % al final de la jornada.
No es tan atípico el panorama que dejan sus resultados, en una región en la que el independentismo ha visto incrementada su fuerza en los últimos diez años. En esta ocasión vuelve a confirmar su mayoría, pero necesitará de pactos para poder alcanzar de aquí a finales de mayo la gobernabilidad, establecida en 65 diputados de un total de 135.