Juan Orlando Hernández ha rechazado las acusaciones que le han hecho en Estados Unidos narcotraficantes hondureños que afrontan juicios en Nueva York.
PUBLICIDADJuan Orlando Hernández ha rechazado las acusaciones que le han hecho en Estados Unidos narcotraficantes hondureños que afrontan juicios en Nueva York, algunos de ellos ya condenados y otros a espera de sentencia.
El presidente de Honduras asegura que los titulares de los medios se forman por la repetición de lo que para él son "mentiras evidentes". En una declaración a la prensa leída en la Casa Presidencial, en Tegucigalpa, sin permitir preguntas de los periodistas, Hernández aseguró:_"En el reciente juicio en Nueva York, el Gobierno de Honduras no tiene ningún interés, ni ninguna opinión con respecto a los participantes o al resultado. Lo que es un asunto aparte, es el uso en Nueva York de testimonios falsos que atacaron deshonestamente a Honduras, que atacaron a sus instituciones y funcionarios públicos, y que falsificaron la historia. El uso y la repetición de testimonios evidentemente falsos, de mentiras evidentes, es indignante. Francamente, es muy ofensivo y repudiable". _
El último testimonio contra el presidente de Honduras ha sido el del narcotraficante confeso Geovanny Fuentes, condenado el lunes en Nueva York por todos los cargos presentados por la fiscalía, entre ellos conspiración para el tráfico de cocaína y posesión de armas.Situó al presidente de Honduras aceptando maletines con dinero en efectivo, reunido con narcos o asegurando que inundaría Estados Unidos de droga. Todo ello mientras era candidato a la presidencia hondureña.
Opositores hondureños protestaron ante el Tribunal Federal de Manhattan y reclamaron la extradición a Estados Unidos del jefe del estado de Honduras.
Según el diario The New York Times la imputación de Hernández en Estados Unidos es una posibilidad abierta. Los fiscales federales de Estados Unidos han tratado de demostrar que el presidente construyó de Honduras una relación simbiótica con los narcotraficantes que proporcionaron apoyo financiero para su ascenso político a cambio de protección contra procesos judiciales.