Heinz Beck, chef de renombre mundial que cuenta con tres estrellas Michelin, explica a Euronews por qué el sector de la restauración, tan castigado, debe recuperarse de la pandemia. También nos ofrece una visión de su reconocida carrera y nos habla de por qué su investigación sobre la nutrición es vital para nuestra salud ahora más que nunca.
Estamos saliendo de una pandemia que ha afectado a todo el mundo. ¿Cuál ha sido la repercusión en su sector?, pregunta la periodista de Euronews Jane Witherspoon.
PUBLICIDAD"Por supuesto, la industria se ha visto muy, muy afectada. Especialmente, en países como el mío (es originario de Alemania y está afincado en Italia) y en toda Europa. El sector de la restauración está muy descapitalizado por los altos costes de la mano de obra. Así que, en lo que respecta a todos esos pequeños restaurantes sin muchos recursos, es muy difícil reabrir esos locales. Y para ello, necesitamos mucha ayuda. No solamente del Gobierno sino, también, de la gente cuando vuelva a la normalidad y a comer, habitualmente, en los restaurantes. Porque, ya sabe, comer en los restaurantes resulta agradable. Es bueno para la persona, para su alma, es bueno para su cerebro. Es bueno para que se sienta mejor al relacionarse... ya sabe. Estar encerrado en casa y no poder comunicarse, no poder relacionarse... está afectando a mucha gente, de manera muy profunda. Y, solamente se puede ayudar a las personas, haciendo que vuelvan a socializar”, declara Heinz Beck.
Se le conoce como el 'maestro' de la cocina moderna. ¿Qué significa eso para usted?
"Para mí, es muy, muy importante. Porque, verá... mi filosofía en lo referente a la cocina es que todos somos lo que comemos. Así que, se trata de hacer el cuerpo más fuerte y la salud más resistente, a través de la comida adecuada. Y, ya sabe que, esto, es algo muy importante en este momento. Porque, saliendo de la pandemia, todo el mundo está mucho más preocupado por lo importante que resulta la salud y lo importante que es el sistema inmunológico. Y, comiendo de forma adecuada, procesando los alimentos de forma adecuada, comiendo las cantidades correctas, el sistema inmunológico se volverá mucho, mucho, mucho más fuerte. Desde hace 20 años estoy inmerso en este tipo de estudios. He hecho muchos experimentos de carácter científico con muchos profesores internacionales, estudiando los efectos de la comida en el organismo. Usted percibe cómo llega la nutrición, la selección de los alimentos y la forma en que se cultivan, y cómo cocinará la comida. Esta es la primera tarea y tiene que ser precisa. Y, luego, el siguiente cometido es cómo mantener los alimentos en el frigorífico y cómo procesarlos de manera que no se pierdan los micronutrientes porque estos son muy importantes para nuestro metabolismo. Y por supuesto, la selección de los alimentos adecuados y su producción en las estaciones precisas, resultan igual de importantes. Porque, en el verano se necesitan muchos, muchos alimentos ricos en minerales y en agua ya que, durante el día, sudamos y perdemos mucha agua en nuestro organismo. Y, la verdad, es que se pierde agua y, también, se pierden muchas sales minerales. Así que, lo que tenemos que hacer es devolverlas a nuestro organismo".
¿Qué cree que hay que hacer en temas como la obesidad infantil?
"¿Sabe? Hay varias cosas. No se observa, solamente, una cosa. Lo primero, es una correcta comunicación. Hay que enseñar a los menores cómo comer y enseñarles qué hay comer y qué hay que evitar. Esto es muy importante. Todo el mundo necesita alimentos diferentes. Habría que empezar a agrupar a las personas y decirles lo que es mejor para ellas.".
PUBLICIDAD
Usted es originario de Alemania, pero es conocido por su cocina italiana. ¿Se inclina por un país u otro?
"No. Soy europeo, ya sabe... Verá, con el Imperio Romano, Europa era un único país. El Imperio Romano iba de Turquía a Portugal, y de Inglaterra a Italia. Así que, al final, todos tenemos las mismas raíces. ¿Por qué íbamos a decir: 'Vale, tú eres inglés y yo soy italiano'? O, ¿yo soy alemán y tú eres francés? Al final, tenemos un conjunto de raíces, realmente profundas, y una hermosa cultura. Y luego, tiene la cultura europea, que es una gran cultura. Deberíamos ayudarnos los unos a los otros para volver a ser fuertes como antes y unificarnos".
Usted es conocido porque tiene varias estrellas Michelin. ¿Eso le supone un poco de presión y le genera expectativas?
"Sí, por supuesto. Me aporta presión y estoy muy, muy, muy contento de contar con varias estrellas Michelin desde hace varios años. Esto ayuda a motivar al personal, mejor todavía, cada año, diciéndole que tenemos que mejorar para llegar con nuevas ideas, con nuevos conceptos, con nuevas creaciones. En definitiva, se trata de alcanzar formas positivas de pensar y de ayudar a mi equipo para aspirar a lo mejor. Porque hay que ser bueno y mejorar, Y hay que tratar de ser aún mejor y llegar a lo más alto".
