"Las fuerzas de defensa y seguridad no pretenden tomar el poder. Queremos asegurar que los miembros del Consejo Militar de Transición entregarán el poder a un gobierno civil", explicaba el vicepresidente del organismo
PUBLICIDADEl Consejo Militar de Transición que dirige Chad después de la muerte de su presidente el pasado martes no pretende tomar el poder. Así lo dijo el mismo día un alto funcionario a diplomáticos reunidos en la capital, Yamena. El organismo, dirigido por uno de los hijos del presidente, pretende convocar elecciones en un plazo de 18 meses.
"Nuestro compromiso en la frontera de la lucha contra el terrorismo, por el que se sacrificó el mariscal de Chad, no disminuirá. Estaremos presentes y activos junto a los países amigos, para luchar sin tregua contra el terrorismo y el oscurantismo", explicaba el vicepresidente del Consejo Militar de Transición, Djimadoum Tirayna, que aseguraba también que "las fuerzas de defensa y seguridad no pretenden tomar el poder. Queremos asegurar que los miembros del Consejo Militar de Transición entregarán el poder a un gobierno civil".
El expresidente Idriss Deby, que llegó al poder hacer 31 años, fue reelegido en las elecciones del 11 de abril por más del 79% de los votos y murió el martes a causa de las heridas sufridas durante una visita a las tropas de primera línea que luchan contra un grupo rebelde en el norte del país.
Las circunstancias seguían siguen siendo turbias y algunos observadores se preguntaban si el hecho de que los militares entregaran el poder al hijo de Deby -en lugar de seguir las disposiciones constitucionales vigentes- equivale a un golpe de estado.