Marruecos avanza hacia la legalización del cannabis medicinal. Decenas de miles de familias viven de estos cultivos. Unos ven la legalización como una oportunidad de negocio, mientras otros desconfían
PUBLICIDADMarruecos se encamina hacia la legalización de la marihuana para uso medicinal, con el mercado europeo en el punto mira.
El Parlamento marroquí debatirá esta semana un proyecto de ley sobre los usos legales del cannabis, de cuyo cultivo viven decenas de miles de familias marroquíes. Entre los cultivadores, la legalización se percibe de distintas maneras, unos como una oportunidad y otros como un riesgo para el negocio.
Mohamed Morabet tiene 60 años y suministra cannabis al mercado negro de la región de Ketama.
"Pedimos que se instalen cooperativas de producción de cannabis en nuestra región para que los jóvenes, la población local, puedan trabajar para el mercado internacional, en regiones históricas de cultivo de cannabis como Beni Sdet, Ketama y Beni Khaled", afirma.
Fadoul Azoul, otro cultivador, es más escéptico.
"Si la legalización nos beneficia desde el punto de vista del precio de venta, será algo positivo para nosotros, pero si el precio que ofrecen no es bueno, todos saldremos perdiendo", opina.
Se estima que estos cultivos mantienen a entre 80.000 y 120.000 familias. Marruecos es el mayor productor mundial de hachís, con alrededor de 700 toneladas anuales.
El proyecto de ley prevé la regulación de toda la cadena de producción, mediante la creación de una agencia nacional de regulación. El objetivo es convertir los c ultivos ilícitos ambientalmente destructivos en actividades legales y sostenibles.