La zafra es cada vez más amarga para el sector azucarero cubano. La falta de combustible y de repuestos provoca paros intermitentes en una industria que concentra su producción en cinco meses del año. En algunos ingenios, la cosecha se ha tenido que hacer manualmente. En otros, se acumulan...
PUBLICIDADLa zafra es cada vez más amarga para el sector azucarero cubano. La falta de combustible y de repuestos provoca paros intermitentes en una industria que concentra su producción en cinco meses del año. En algunos ingenios, la cosecha se ha tenido que hacer manualmente. En otros, se acumulan los días de paro.
"Empezamos a cosechar este campo de caña de azúcar, y debemos hacerlo en tres días o en setenta y dos horas, pero tardamos doce días en cortar este campo de caña debido a que nos pararon por (falta) de combustible. Hoy estamos parados. La central para la que trabajamos está parada", explicaba Omar Hernández, presidente de la cooperativa Madruga.
Se da por hecho que este año no se alcanzará el objetivo de producción de 1,2 millones de toneladas, una cantidad irrisoria comparada con los 8 millones de toneladas que llegó a generar la Isla. En el ingenio Boris Luis Santa Coloma, en la provincia Mayabeque, las máquinas han estado paradas durante casi dos semanas.
"Dentro de la industria, como ustedes pueden observar, hay una obsolescencia tecnológica muy grande. Que parte desde el basculador, toda el área de los molinos, el sistema de evaporación, las calderas, esta parte aquí de generación de vapor y la planta eléctrica", comenta Sonia Montes, jefa de mantenimiento de la planta de Boris Luis Santa Coloma.
El embargo estadounidense pesa como una losa sobre el sector azucarero, uno de los pilares de la economía cubana junto al tabaco y el turismo. Pero la falta de combustibles y las carencias tecnológicas no son los únicos factores que explican este declive. Los expertos señalan también a deficiencias en la organización y el funcionamiento de la industria azucarera.