Italia y Turquía dan este viernes en Roma el pistoletazo de salida. La final, el 11 de julio en Londres.
PUBLICIDADLa espera ha sido mucho más larga de lo previsto y las dificultades, infinitas. Pero ha llegado el momento. Este viernes arranca la Eurocopa 2020, que se jugará en varios países simultáneamente y que contará lamentablemente con un rival no deseado y siempre peligroso: el coronavirus. Todos los equipos participantes arracan la competición sin saber en qué momento alguno de sus jugadores puede dar positivo.
A la espera de que eso no suceda, toda precaución será poca, tanto dentro de cada selección como fuera. Jenő Sipos, portavoz de la Asociación de Fútbol de Hungría, recuerda a las puertas del Puskas Arena que el uso de mascarilla "no es obligatorio dentro del estadio, pero sin duda es recomendable".
Las gradas del estadio de Hungría estarán completamente llenas, lo que se traduce en 65.000 personas dentro del mismo. Todo aquel aficionado que presente su tarjeta de inmunidad o una PCR negativa reciente podrá entrar sin problemas.
"Queremos evitar que haya una gran cantidad de gente en las puertas una o dos horas antes de los partidos", recuerda Sipos, "y por eso hemos creado tres puntos de recogida de entradas. Pedimos por favor a la gente que adquiera su pase lo antes posible, se tome una cerveza antes del partido y llegue al estadio cómodamente".
No muy lejos del estadio, la fanzone de la capital húngara también espera una importante afluencia de aficionados. Budapest acoge en total cuatro partidos a lo largo de toda la competición. Dicha fan zone contará con varias pantallas gigantes para poder ver los partidos. Al tratarse de un evento al aire libre, los asistentes no necesitan ni siquiera una tarjeta de inmunidad.
La Eurocopa 2020 comienza este viernes en Roma con el duelo entre Italia y Turquía. Hasta el próximo 11 de julio 24 selecciones lucharán por llegar a la ansiada final de Londres. El balón de la Eurocopa, por fin, echa a rodar.