Algunos países europeos como Francia sufren la primera ola de calor de la temporada, con temperaturas que localmente podrían acercarse a los 40ºC.
Algunos países europeos como Francia sufren la primera ola de calor de la temporada, con temperaturas que localmente podrían acercarse a los 40ºC.
Estas son imágenes de la localidad del Sète, en la región de Occitania, bañada por las aguas del Mediterráneo, donde los termómetros alcanzaron el domingo temperaturas 10 o 12 grados centígrados, superiores a las habituales para un mes de junio.
"La ventaja es la brisa del mar y luego el Mediterráneo", dice una mujer.
El caso es que hay ganas de playa y muchas, porque las restricciones con los sucesivos confinamientos han limitado los desplazamientos.
"El tiempo se prestaba, hacía muy bueno, así que he aprovechado el fin de semana para bañarme y relajarme. Una tiene la impresión de que hay que liberar toda la tensión de este confinamiento", comenta Ariane Fontanel, bañista en la playa de Gruissan, cercana a Narbona.
"Básicamente, vengo de la Bretaña para buscar el sol del sur, sienta bien. Aprovecho mis días de descanso para venir a broncearme, tomar el sol, aprovechar un poco después de la Covid-19. Sienta bien", añade Elena Geniez.
La semana ha empezado con temperaturas elevadas que podrían desencadenar tormentas acompañadas de granizo en algunas zonas de los Pirineos franceses.
De momento, a disfrutar del buen tiempo.