Tras su paso por Tokio, donde asistió a la apertura de los Juegos Olímpicos, el presidente francés llegó a la Polinesia Francesa.
Macron llegó este sábado 24 de julio a Tahití, la isla más grande de la Polinesia Francesa, entre una calurosa bienvenida y reclamos de perdón por los ensayos nucleares.
Tras su paso por Tokio, donde asistió a la apertura de los Juegos Olímpicos, el presidente francés aterrizó en Papeete, capital tahitiana, en el marco de una gira de por el Pacífico, con el fin de reforzar vínculos con las antiguas colonias francesas en esta región. Es el primer viaje del mandatario a esta zona desde el inicio de la pandemia.
Emmanuel Macron fue recibido con rituales polinesios: collares de flores y un recital tradicional.
Aprovechando el contexto sanitario actual, el mandatario exhortó a los polinesios a vacunarse de la Covid-19, que ha provocado 145 muertos en la antigua colonia francesa.
La visita se produce en un contexto de manifestaciones contra los cerca de 200 ensayos nucleares que Francia realizó entre 1966 y 1996. Durante décadas, los habitantes de la Polinesia francesa, que ahora piden que Francia se disculpe por lo ocurrido, estuvieron expuestos a altos niveles de radiactividad.