Las celebraciones tienen lugar pocas horas después de la cumbre internacional celebrada en Kiev para estudiar las formas de recuperar la península arrebatada por Rusia.
PUBLICIDADHan pasado 30 años desde que alcanzara su independencia de la Unión Soviética, pero lo cierto es que Ucrania sigue teniendo que hacer frente a los abusos de Moscú.
Las celebraciones de este año tienen lugar pocas horas después de la cumbre en Kiev sobre Crimea, en la que representantes de más de 40 países estudiaron la formas de presionar a Rusia para que esta devuelva a Ucrania la península arrebatada.
"Somos un país joven con una historia milenaria", decía el presidente Volodímir Zelenski ante el público asistente y las autoridades, entre las que se encontraban algunos expresidentes del país como Leonid Kuchma, Víctor Yushchenko y Petro Poroshenko. "Somos descendientes de un país poderoso que fue el centro de Europa. Pero no sólo tenemos que sentirnos en consecuencia. Debemos comportarnos en consecuencia", recordaba Zelenski.
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La llamada 'Plataforma Crimea' celebrada en Kiev contó entre muchos asistentes con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, que mostró el firme compromiso de la Unión en "no reconocer nunca" la polémica anexión de 2014. "Independencia significa soberanía", decía Michel durante su intervención en la cumbre. "Significa integridad territorial dentro de las fronteras reconocidas internacionalmente".
Rusia siempre ha mantenido y volvió a hacerlo con motivo de la cumbre que dicha anexión se produjo por decisión del pueblo de Crimea y tras un referéndum sobre cuya legalidad ambas partes, Rusia y Occidente, discrepan totalmente.