Tras una larga espera, Argentina ha visto aterrizar en su suelo al primero de los muchos aviones que llegarán en los próximos meses cargados con dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech. De la bodega salieron algo más de 100 000 dosis, una gota de agua si se compara con los 20 millones que...
Tras una larga espera, Argentina ha visto aterrizar en su suelo al primero de los muchos aviones que llegarán en los próximos meses cargados con dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech. De la bodega salieron algo más de 100 000 dosis, una gota de agua si se compara con los 20 millones que el consorcio germano estadounidense deberá enviar antes de que acabe el año.
La llegada de este primer lote permite acelerar el Plan Estratégico de Vacunación nacional, que ya ha conseguido poner una o dos dosis vacunas contra la COVID-19 al 73% de los cerca de 45 millones de habitantes que tiene Argentina.
"Las vacunas serán utilizadas de acuerdo a los planes provinciales para iniciar los esquemas de vacunación de los adolescentes sin comorbilidades empezando con los 17 años", explicaba a pie de avión la ministra de Salud, Carla Vizzotti.
Un refuerzo al que se sumarán 850 000 dosis del preparado de AstraZeneca donadas por España y que también llegarán en las próximas semanas. Argentina está en plena curva de descenso del número de contagios diarios y apenas se está viendo afectada por la peligrosa variante Delta del coronavirus.