Australia defiende que rompió el contrato con Francia "por interés estratégico". El primer ministro australiano, Scott Morrison, ha dicho que llegaron a la conclusión de que "no eran los submarinos que Australia necesitaba"
PUBLICIDAD"No eran los submarinos que necesitábamos". Así ha explicado el primer ministro australiano su decisión de romper el contrato de compra de 12 submarinos franceses, por un valor de 56 000 millones de euros, y sustituirlo por un acuerdo militar con Estados Unidos.
Scott Morrison ha dicho que "comprende" esto haya provocado la ira de Francia y un conflicto diplomático, que ha incluido una inédita llamada a consultas de los embajadores franceses en Canberra y Washington, pero que su Gobierno tomó esa decisión por una cuestión de "interés estratégico".
"Por supuesto que estamos decepcionados por la decisión de Francia de retirar a su embajador, pero la comprendemos y respetamos, y también comprendemos la profunda decepción por la cancelación del contrato -dijo Morrison-. Pero llegamos a la conclusión de que la capacidad de los submarinos que iban a proporcionar no era lo que Australia necesitaba para proteger sus intereses soberanos".
"Se ha roto la confianza", dice el jefe de la diplomacia francesa
El jefe de la diplomacia francesa ha calificado de "muy grave" la crisis desatada por estos acontecimientos. "Se ha roto la confianza" señaló Jean Yves Le Drian, quien ha advertido de repercusiones en la futura estrategia de la OTAN.
"Es muy simbólico. Hubo una mentira, hubo duplicidad, hubo una gran ruptura de confianza y hubo desprecio, así que las cosas no van bien entre nosotros, en absoluto. Significa que hay una crisis", dijo.
Australia dio la espalda a Francia y sus submarinos tras firmar un acuerdo estratégico con Estados Unidos y el Reino Unido para hacer frente a la pujanza china en el Índico y el Pacífico. Este acuerdo incluye la posible adquisición de submarinos nucleares estadounidenses.
Más allá del gigantesco contrato perdido, Francia ha sufrido el hecho de que la dejaran la margen del partenariado. "Joe Biden se ha comportado como Donald Trump, pero sin los tuits" ha dicho el jefe de la diplomacia francesa, quien aseguró que este asunto pesará en la nueva estrategia de la Alianza Atlántica.