Para Christian Lindner esta es la tercera campaña electoral al Bundestag como líder del Partido Democrático Liberal, el FDP. El ahora consultor de gestión, de 42 años, asumió la presidencia del partido en 2013 después de que el FDP no lograra entrar en el Bundestag.
PUBLICIDADPara Christian Lindner esta es la tercera campaña electoral al Bundestag como líder del Partido Democrático Liberal, el FDP. El ahora consultor de gestión, de 42 años, asumió la presidencia del partido en 2013 después de que el FDP no lograra entrar en el Bundestag. Ahora Lindner aspira a convertirse en el ministro de Economía y los liberales intentan, sobre todo, no repetir los errores del pasado.
Tras las elecciones al Bundestag en 2017, Lindner había abandonado las conversaciones para crear una coalición con los llamados Partidos de la Unión (CDU/CSU) y los Verdes con la ya famosa frase: "Es mejor no gobernar que gobernar mal".
Durante la crisis provocada por el coronavirus, el político del FDP Wolfgang Kubicki ha escrito un libro titulado: "La libertad aplastada". En la campaña electoral, Lindner subraya que su partido no está en absoluto entre aquellas formaciones que niegan la aparición del virus. Sin embargo, califica la cuarentena como un "método de la Edad Media".
El partido se considera a sí mismo un "baluarte contra la izquierda", no siempre con una clara delimitación de la derecha populista de Alternativa para Alemania (AfD).
En la lucha contra el cambio climático, Lindner confía en el espíritu de la ingeniería alemana. En materia económica, el FDP no ve con buenos ojos que se suban los impuestos a los ricos.
"Los que tienen una renta alta también pagan más impuestos. Quienes obtienen esos ingresos, a menudo, no los obtienen por sí mismos en este país, sino que son los ingresos de su negocio artesanal, que debe proporcionar una rentabilidad económica", señalaba Christian Lindner en una entrevista.
El liberal es considerado como el 'partido de los conductores de Porsche'. Las mujeres no suelen tenerlo fácil en el FDP: Lindner también ha sido criticado por su trato a las compañeras de partido.
Dado que la formación podría ser necesaria para formar una coalición de Gobierno, algunos llaman a Christian Lindner ‘la galleta de la fortuna’.