Los manifestantes chiíes exigían la dimisión del juez Tarek Bitar, al que acusan de estar politizando su investigación sobre la trágica explosión de 2020 en Beirut.
PUBLICIDADLa grave crisis política, social y económica que atraviesa estos días el Líbano se ha visto este jueves trasladada a las calles. Las protestas ciudadanas de este jueves acabaron convirtiéndose en violentos enfrentamientos en los que habrían muerto seis personas con decenas de heridos, según informan desde el ministerio de Interior.
Si bien se sabe que los disparos mortales procedían de los edificios circundantes a la protesta, en la zona de Tayouneh, no está claro por el momento quiénes fueron los autores de los mismos. El Ejército ha sido desplegado por la ciudad y trata ahora de dar con los responsables.
Las manifestaciones, organizadas por los grupos chiíes Hizbulá y Amal, estaban dirigidas al juez Tarek Bitar, del que exigen su dimisión. Bitar es el encargado del caso sobre la gran explosión del pasado año en el puerto de la ciudad, que se saldó con 215 fallecidos y miles de heridos.
Los chíies acusan al juez de estar politizando su investigación al estar dirigir todas sus pesquisas contra exministros de esta rama religiosa. Tras lo sucedido este jueves muchos de los manifestantes de Hizbulá han tomado también las armas, convirtiendo Beirut en escenario de un caos y desconcierto que podría acabar derivando de no remediarse en un conflicto civil.