Con Sevilla siempre en el corazón, García-Pelayo prosigue sus cábalas de trotamundos del séptimo arte. Su cámara habrá viajado en un año de Sevilla a Kazajistán, pasando por Argentina Portugal y la India.
Ainur, que en kazajo significa rayo de luz de luna, es una de las siete películas se ha propuesto realizar en una año Gonzalo García-Pelayo. Productor musical, director de cine, locutor, y jugador profesional de ruleta, son algunas de las mil facetas de Gonzalo.
La ruleta y otras mil facetas
"En este rodaje último hemos tenido una gran emoción al tener 15 o 20 personas vibrando como una sola cuerda. Cuando hago películas no es igual que cuando trato con los números solamente lo hago con la inteligencia emocional y solamente lo hago con las intuiciones. Es una manera de acercarme al tema que voy a tratar completamente diferente, uno emocional y otro únicamente intelectual", explica Gonzalo García-Pelayo, director de cine.
Viajero, amante del cine y transgresor
Viajero, amante del cine y transgresor. Para Gonzalo García-Pelayo, más incluso que la ruleta, el bitcóin o los caballos, el cine es su gran apuesta.
"A mí me gusta ponerme un poco a contracorriente y eso automáticamente me lleva a sentirme transgresor. Y al hacer las películas me gusta expresar ese tipo de expresión o de sentimiento, que no siempre tienen que ser transgresores", García-Pelayo.
Dejen de prohibir que no me van a domar
'Dejen de prohibir que no alcanzo a desobedecer todo', película rodada en Sevilla, es la primera de su septeto cinematográfico.
"'Dejen de prohibir que no alcanzo a desobedecer todo' tiene una voluntad transgresora en todos sus fotogramas", concluye el cineasta.
Sevilla en el corazón
Con Sevilla siempre en el corazón, García-Pelayo prosigue sus cábalas de trotamundos del séptimo arte. Su cámara habrá viajado en un año de Sevilla a Kazajistán, pasando por Argentina Portugal y la India.