Navidades en Polonia con un refugiado afgano

Navidades en Polonia con un refugiado afgano
Derechos de autor Euronews
Por Magdalena Chodownik
Compartir esta noticiaComentarios
Compartir esta noticiaClose Button
Copia/pega el link embed del vídeo de abajo:Copy to clipboardCopied

A pesar del rechazo de Varsovia a la entrada de inmigrantes, algunos ciudadanos optan por una actitud bastante más acogedora con los más necesitados.

PUBLICIDAD

Dejar un plato vacío en la mesa durante la cena de Navidad es una larga tradición polaca. Podría ser para un invitado inesperado, solitario y hambriento que podría llamar a la puerta este día, momento en el que sería bienvenido.

En respuesta a la crisis migratoria en el este de Polonia, Martyna Czyżewska y su marido decidieron acoger a un solicitante de asilo de Afganistán. "Es mi país el que no acoge a la gente así que es como si yo no acogiera a la gente. Me siento responsable. Sólo trato de poner la acción en mis manos, sentirme más poderosa que impotente", explica ella. 

Han pasado 6 meses desde que Shamsul Rakhman cruzó la frontera entre Polonia y Bielorrusia y seis semanas desde que vive con la familia. "Basándome en la situación de nuestro país, que se prolonga desde hace muchos años, me fui, planeé este viaje por el fútbol, ya que la liga estaba en curso en Rusia, entonces llegamos allí y desde Rusia a través de Bielorrusia y la frontera, llegamos a Polonia."

Desde hace más de medio año, miles de inmigrantes cruzan la frontera entre Polonia y Bielorrusia. a través de vallas alambradas, enfrentándose a la violencia de los funcionarios de ambos lados, y a las duras condiciones forestales y climáticas. Una docena de ellos ha muerto. Shamsul fue uno de los afortunados.

Refugiado y anfitriones recuerdan el día en el que la trabajadora social les citó. Shansum, cuentan, parecía estresado la situación se asemejaba a una entrevista de trabajo.

En la familia de Czyżewski, el famoso plato vacío no lo estaba este año. "Estábamos explicando cómo es la Navidad y cuáles son las tradiciones y el nos dijo que era muy parecido a como se hacían en Eid, comiendo mucho y con la familia", recuerda Bartek. 

Mientras la crisis humanitaria en las fronteras orientales de la Unión Europea continúa, con miles de inmigrantes aún atrapados en el limbo en condiciones peligrosas e invernales, la familia de Czyżewski es un ejemplo de cómo un corazón abierto puede acoger a un invitado inesperado, solitario y hambriento.

Compartir esta noticiaComentarios

Noticias relacionadas

Numerosos feligreses de varios países celebran la misa de la Navidad ortodoxa

Human Rights Watch culpa tanto a Bielorrusia como a Polonia de violaciones de los Derechos Humanos

Aumentan las muertes y desapariciones de migrantes en los últimos diez años