Es el mensaje del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez y la primera ministra danesa, Mette Frederiksen al presidente Volodímir Zelensky en Kiev.
PUBLICIDADEs el mensaje del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez y la primera ministra danesa, Mette Frederiksen al presidente Volodímir Zelensky en Kiev.
Sánchez y Frederiksen visitaron Borodianka, en el noroeste de Kiev, arrasada por las tropas rusas durante la ocupación, en la que la población sufrió la represión de los invasores rusos.
Sánchez anunció el mayor envío de armamento y equipo militar español a Ucrania, así como la asistencia de equipos de expertos y forenses para "investigar y enjuiciar a los responsables de crímenes de guerra".
Frederiksen aseguró:"Está claro que uno de los mensajes más importantes de Dinamarca hoy es que esperamos entregarle aún más armas a Ucrania porque es lo que más se necesita".
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España enumeró el envío de apoyo:"Un buque de la Armada española, el Isabel, ha zarpado hoy de puerto español con destino a Polonia, cargado con 200 toneladas de munición moderna y todo el material. El barco lleva 30 camiones, varios vehículos especiales de transporte pesado y 10 vehículos pequeños cargados con el material militar que será trasladado a Ucrania."
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, además de donar dinero y material de guerra prohibió atracar en su país a cualquier embarcación de bandera rusa o que estuviera vinculada a Rusia: "Hoy anuncio otros 800 millones de dólares para aumentar la capacidad de Ucrania para luchar en el este, en la región de Donbas. Este paquete incluye armas de artillería pesada, docenas de obuses y 144.000 suministros de munición para esos obuses. También incluye más drones tácticos".
Alemania busca fórmulas, vía terceros países, para hacer frente a las demandas de carros de combate que pide urgentemente Kiev. Todo ello en medio de las críticas internas y externas al canciller Olaf Scholz por su gestión ante la guerra de Ucrania.
La idea es que presumiblemente Eslovenia, entregue a Kiev viejo armamento de fabricación soviética y que Berlín, por su parte, preste a ese país de la Alianza Atlántica tanques nuevos "Marder" o "Fuchs" fabricados en Alemania.