El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, califica de "chantaje" ruso el corte del gas a Bulgaria y Polonia. Ha trasladado el apoyo de España a los búlgaros en el encuentro con el presidente Radev en el Palacio de la Moncloa.
El presidente del Gobierno de España califica de chantaje y considera inaceptable el corte ruso del suministro de gas a Polonia y Bulgaria. Pedro Sánchez ha publicado a través de su cuenta de Twitter este mensaje en el que también ha comunicado que le ha trasladado todo el apoyo de España directamente al presidente búlgaro Rumen Radev.
Ambos han mantenido este encuentro en el Palacio de la Moncloa justo un día después de que la rusa Gazprom cortara el grifo a los búlgaros y a los polacos por negarse a pagar el gas en rublos.
El próximo 2 de mayo los ministros de Energía de la UE se reunirán de forma extraordinaria para abordar la situación. Por su parte Bulgaria ha anunciado este jueves que el próximo 4 de mayo el Parlamento autorizará el envío de armas a Ucrania.
Según Sánchez, los efectos del ataque ordenado por el presidente ruso, Vladímir Putin, redoblan la importancia de unas relaciones entre España y Bulgaria, que calificó de excelentes.
En el marco de esas relaciones, Sánchez y Radev abordaron la presencia de cuatro cazas españoles y 130 militares del Ejército del Aire que se desplegaron en Bulgaria desde febrero y hasta finales de marzo, en el marco de una misión de la OTAN de refuerzo de policía aérea.
La OTAN puso en marcha esta misión en 2014 tras la anexión ilegal de la península de Crimea por parte de Rusia, con el objetivo de disuadir a este país de la agresión contra los aliados de la Alianza Atlántica.
España desplegó este destacamento el 11 de febrero, trece días antes de que Rusia comenzase su invasión contra Ucrania y fue la primera vez que se enviaban cazas españoles a Bulgaria para apoyar las medidas de disuasión y defensa de la Alianza.
Ambos mandatarios también abordaron la agenda europea de los próximos meses y la próxima cumbre de la OTAN, que se celebrará los días 29 y 30 de junio en Madrid.
Sánchez tenía previsto emprender este jueves un viaje a Moldavia y Polonia para expresar a las autoridades de estos países su apoyo ante la labor que están realizando en la acogida de refugiados ucranianos.
También iba a abordar en Varsovia cómo afecta la decisión rusa de cortar su suministro de gas a Polonia.
Sin embargo, pospuso ese viaje para asistir en el Congreso a la votación de las medidas para hacer frente a los efectos económicos y sociales de la guerra en Ucrania, cuyo resultado está muy ajustado.