Las fuerzas rusas tomaron el control de esta ciudad ucraniana en el mar de Azov sin apenas encontrar resistencia.
En el sur de Ucrania se encuentra Berdiansk, cuyo paisaje cotidiano contrasta con el de la desolada Mariúpol, a tan solo 70 km de distancia. Las fuerzas rusas tomaron el control de esta ciudad en el mar de Azov en los primeros días de la invasión de Ucrania sin apenas encontrar resistencia.
En las semanas siguientes, la ciudad ha quedado aislada de otras partes del país, mientras las tropas de Moscú luchan por hacerse con franjas del este y el sur de Ucrania.
Alexander Saulenko, jefe de la nueva administración prorrusa de Berdiansk afirma: "En Berdiansk no hubo combates, por lo que se ha conservado toda la infraestructura de la ciudad. En estos momentos aquí está la administración civil-militar. Estamos en una fase de transición, de Ucrania a Rusia".
Gira de prensa organizada
El ejercito ruso permitió a los periodistas viajar tanto a Berdiansk como a Melitopol a unos 100 kilómetros al oeste, dentro del marco de una gira de prensa que habían organizado.
En ambas ciudades, Moscú ha instalado administraciones locales encargadas de devolver una apariencia de vida normal. La población, aunque parece estar segura en Berdiansk, son conscientes de la realidad que vive el resto del país.
Svetlana Klimova, antigua trabajadora de una gasolinera, dice: "Todas las tropas (ucranianas) abandonaron la ciudad. Solo quedaron policías para vigilar la ciudad, y eso es todo. Si las tropas se hubieran quedado, habría sido como Mariupol".
"Esperaba a los rusos todos los días. Cuando me enteré (de la llegada de los rusos), me alegré tanto que tenía lágrimas en los ojos", dice Valery Berdnik, ex obrero.
Olga Chernenko, refugiada de Mariupol, confiesa: "Tengo miedo de que empiece la Tercera Guerra Mundial. Porque si se suministran armas a Ucrania, Rusia tomará represalias con ataques, y quién sabe cómo puede acabar esto, da mucho miedo".
Objetivo estratégico
Ambas ciudades son muy importantes a nivel estratégico para Rusia.
Junto con Mariúpol formarían parte de un corredor terrestre que une el territorio ruso con Crimea, la península del Mar Negro que Moscú se anexionó de Ucrania en 2014.