SEÚL - Corea del Norte ha levantado las restricciones de movimiento impuestas en la capital, Pionyang, tras la primera admisión de un brote de COVID-19 hace semanas, informaron medios de comunicación, ya que el país aislado dice que la situación del coronavirus está ahora bajo control.
El Norte se ha visto inmerso en una ardua batalla contra una ola de COVID-19 sin precedentes desde que declaró el estado de emergencia e impuso un confinamiento nacional este mes, alimentando la preocupación por la falta de vacunas, suministros médicos y escasez de alimentos.
A partir del domingo, las restricciones se han levantado, dijo la agencia de noticias japonesa Kyodo, citando una fuente no identificada en Pekín.
Un portavoz del Ministerio de Unificación de Corea del Sur, que se ocupa de los asuntos intercoreanos, dijo que no podía confirmar el artículo, ya que los medios de comunicación estatales del Norte no habían anunciado la decisión.
El informe de Kyodo se produjo poco después de que el líder norcoreano, Kim Jong-un, presidiera una reunión del politburó para discutir la revisión de las restricciones antipandémicas, valorando que la situación sobre el primer brote de COVID-19 del país estaba "mejorando".
"El politburó examinó la cuestión de la coordinación y aplicación efectiva y rápida de las regulaciones y directrices antiepidémicas, dada la actual situación estable de antiepidemia", dijo el domingo el medio estatal norcoreano KCNA.
Corea del Norte informó de la existencia de 100.710 personas más con síntomas de fiebre y de una muerte más hasta la noche del domingo, en comparación con las 390.000 personas con fiebrre de hace dos semanas, dijo KCNA. El número de muertos aumentó a 70.
Corea del Norte no ha confirmado el número total de personas que han dado positivo por el coronavirus, al parecer por falta de suministros para las pruebas. Expertos consultados han dicho que las cifras anunciadas podrían estar subestimadas y que es difícil evaluar la magnitud real de la situación.