La región española ha recibido la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias (UME) para hacer frente a los tres incendios simultáneos. Se prevé que la ola de calor siga en España hasta el sábado. La canícula abrasa también a Francia, aunque con algunos grados menos.
Alerta máxima en Cataluña, al noreste de España, donde los bomberos están al límite. Han conseguido contener -aunque no controlar- hasta siete focos de tres incendios simultáneos . Solo en uno de esos núcleos, en la localidad de Lladurs, podrían arder unas 50 000 hectáreas.
Con la ayuda de la UME
Todas las unidades de bomberos de la región están de guardia y más de cien efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, la UME, se han incorporado a las tareas de extinción del fuego.
Otras siete comunidades autónomas, entre ellas Galicia, Navarra, Valencia y Andalucía también han sufrido incendios que han calcinado miles de hectáreas.
Peligro extremo de incendios
Se teme que la situación empeorará este viernes, alimentada por nuevos máximos de la ola de calor preveraniega, que supera los cuarenta grados en muchas partes del país. Seguirá hasta el sábado, según la agencia española de meteorología, con peligro extremo de nuevos incendios en la mayor parte del territorio.
Francia y los recuerdos de la pesadilla de 2003
Una ola tórrida que asfixia también a Francia: Doce departamentos se encuentran en alerta roja, con temperaturas de entre 34 y 38 grados, con algunos picos de cuarenta. El calor se extenderá al norte y se intensificará en el oeste y el sur. El sábado será aún peor.
Las residencias de mayores se preparan para afrontarlo en mejores condiciones que hace casi veinte años, cuando los rigores de la canícula mataron en este país a 15 000 personas, sobre todo ancianos y personas vulnerables.