KIEV, 23 jun - Las tropas ucranianas podrían tener que retirarse de la ciudad de Lisichansk, en primera línea de fuego, para evitar un cerco después de que las fuerzas rusas capturaron dos asentamientos al sur, dijo el jueves el gobernador regional, Serhiy Gaidai.
Lisichansk y la vecina Severodonetsk se han convertido en el foco de la ofensiva rusa en la región oriental de Dombás y la batalla allí se acerca a un "clímax feroz", dijo el miércoles un asesor presidencial ucraniano.
El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania confirmó el jueves la pérdida de Rai-Oleksandrivka y Loskutivka, situadas a unos 5 kilómetros de Lisichansk, y dijo que las tropas rusas estaban tratando de rodear a las fuerzas ucranianas allí.
No dijo cómo respondería, pero Gaidai indicó que las tropas ucranianas podrían tener que retroceder.
"Para evitar el cerco, nuestro mando podría ordenar que las tropas se retiren a nuevas posiciones", dijo en la televisión nacional. "Toda Lisichansk está al alcance de su fuego. Es muy peligroso en la ciudad".
Según señaló, todavía se puede llegar a Lisichansk por carretera, lo que permitía continuar con las evacuaciones de civiles. La agencia de noticias rusa TASS citó con anterioridad a separatistas prorrusos que afirmaron que la ciudad estaba rodeada y sin suministros.
La guerra ha entrado en una brutal fase de desgaste en las últimas semanas, con las fuerzas rusas concentrando su abrumadora potencia de fuego de artillería en esta bolsa del Dombás, que Moscú reclama en nombre de los separatistas.
El Ministerio de Defensa británico dijo el jueves que los recientes avances de Rusia están poniendo a las fuerzas ucranianas que resisten en Lisichansk-Severodonetsk bajo una presión cada vez mayor.
"Sin embargo, sus esfuerzos (de Rusia) para lograr un cerco más profundo para tomar el oeste de la región de Donetsk siguen estancados", tuiteó el ministerio.