Por Crispian Balmer y Giuseppe Fonte
ROMA, 15 jul - Italia podría necesitar unas elecciones anticipadas para superar el estancamiento político, dijeron el viernes responsables del Gobierno, después de que el primer ministro Mario Draghi presentara su dimisión tras el motín de un socio de la coalición.
El presidente Sergio Mattarella rechazó el jueves la dimisión de Draghi y le pidió que se dirigiera al Parlamento la próxima semana para tener una visión más clara de la situación política.
Si no es posible recuperar inmediatamente la unidad en las filas del Gobierno, la única alternativa sería la convocatoria de elecciones en otoño, dijo el ministro de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio, quien advirtió que una votación anticipada sería bien recibida por Rusia, pero perjudicaría a la economía italiana.
"Si Draghi cae, votamos", dijo a la radio RTL, y añadió que sin un Gobierno que funcione plenamente en los próximos meses, Italia se arriesgaría a perder miles de millones de euros de los fondos de recuperación post-pandemia de la Unión Europea y no podría promulgar medidas para combatir los altos costes de la energía.
"Unas elecciones anticipadas (...) son un problema para el país".
El Gobierno de Draghi, que lleva 18 meses en el poder, se vio sumido en el caos por el populista Movimiento 5 Estrellas, que boicoteó el jueves una moción de confianza parlamentaria sobre los planes de Draghi para hacer frente al creciente coste de la vida, argumentando que no iban lo suficientemente lejos.
Los críticos afirman que el partido, desgarrado por un cisma el mes pasado, actuó simplemente por interés propio, ansioso por elevar su perfil ante los votantes tras una caída en las encuestas de opinión.
Los riesgos de caos político han inquietado a los mercados financieros, y la prima que paga Italia por la deuda alemana ha subido el viernes a un máximo de un mes.