Por Steve Holland y Aziz El Yaakoubi
YEDA, Arabia Saudita, 15 jul -Joe Biden comenzó el viernes una visita a Arabia Saudita chocando los puños con el príncipe heredero Mohamed bin Salman y estrechando la mano del rey Salman, mientras Washington busca restablecer su relación con un país que el presidente estadounidense prometió en su día convertir en un "paria" en la escena mundial.
Los intereses energéticos y de seguridad llevaron a Biden y sus colaboradores a decidir no aislar al gigante petrolero del golfo Pérsico, que ha reforzado sus vínculos con Rusia y China.
Sin embargo, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca redujo las expectativas de un aumento inmediato de la oferta de petróleo para ayudar a reducir los altos costos de la gasolina y aliviar la mayor inflación de Estados Unidos en cuatro décadas.
Biden, que dijo que hablaría de derechos humanos durante la visita, fue recibido por el príncipe Khalid al-Faisal, gobernador de la provincia de La Meca, que incluye la ciudad de Yeda, en el Mar Rojo.
El presidente se dirigió entonces al palacio real, donde la televisión saudita lo mostró chocando los puños con el príncipe heredero, conocido como MbS. La agencia estatal de noticias SPA publicó más tarde una foto de Biden estrechando la mano del rey Salman bin Abdulaziz.
La visita está siendo observada de cerca con especial atención al lenguaje corporal y la retórica y pondrá a prueba la capacidad de Biden para restablecer las relaciones con el príncipe heredero, el gobernante de facto del reino.
Los servicios de inteligencia de Estados Unidos concluyeron que MbS aprobó directamente el asesinato en 2018 del columnista del Washington Post Jamal Khashoggi, mientras que el príncipe heredero niega haber tenido un papel en el asesinato.
Biden quiere "recalibrar" las relaciones de Washington con Riad y no romperlas, subrayó el asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan.
El mandatario dijo el jueves que su posición sobre el asesinato de Khashoggi estaba "absolutamente" clara. Biden calificó al príncipe saudita de "paria" hace menos de dos años, tras el asesinato del periodista y mientras hacía campaña para la presidencia.
Biden afirmó que plantearía los derechos humanos en Arabia Saudita, pero no dijo específicamente si abordaría el asesinato de Khashoggi con sus líderes.
Yeda acoge el sábado una reunión más amplia de dirigentes árabes.
Biden debatirá sobre la seguridad energética con los líderes de los productores de petróleo del golfo Pérsico y espera que la OPEP+ tome más medidas para aumentar la producción. Pero es poco probable que haya anuncios bilaterales en las conversaciones, dijo Sullivan a periodistas de camino a Yeda.
"Creemos que cualquier otra medida que se adopte para garantizar que haya suficiente energía para proteger la salud de la economía mundial, se hará en el contexto de la OPEP+", dijo Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional. "Tenemos la esperanza de que veremos acciones adicionales por parte de la OPEP+ en las próximas semanas".
El grupo OPEP+, que incluye a Rusia, se reunirá el 3 de agosto.