En el muelle de la bahía de Oslo, la morsa Freya, casi ha conseguido el estatus de celebridad en Noruega. Este verano ha visitado varios muelles a lo largo de la costa. Y desde tiempo atrás también. Fue vista por primera vez en la ciudad de Troms hace tres años.
No todos los puertos tienen una morsa que se suba a los barcos.
En el muelle de la bahía de Oslo, la morsa Freya, casi ha conseguido el estatus de celebridad en Noruega.
Este verano ha visitado varios muelles a lo largo de la costa. Y desde tiempo atrás también. Fue vista por primera vez en la ciudad de Troms hace tres años.
Tiene ya su propio público.
Ahora está en el muelle de Frognerkilen en la capital noruega.
Allí se sube esforzadamente a algunos fuera borda.
Con su media tonelada de peso causa algunos daños y los responsables de seguridad marítima intentan que la gente se acerque lo menos posible a la bella Freya.