La nueva campaña lanzada por el Ministerio de Igualdad no ha dejado indiferente a nadie. Bajo el lema "un verano para todas, sin estereotipos y sin violencia estética" el cartel pretende mostrar la diversidad de cuerpos femeninos.
PUBLICIDAD“Creo que es una campaña tremendamente importante. Visibilizar que existen cuerpos gordos, con celulitis, estrías, tetas caídas y michelines es construir un espacio donde las mujeres no sientan que deben algo por existir”, celebra Myriam Rodríguez, española de 27 años.
La nueva campaña lanzada por el Ministerio de Igualdad no ha dejado indiferente a nadie. Bajo el lema "un verano para todas, sin estereotipos y sin violencia estética" el cartel pretende mostrar la diversidad de los cuerpos femeninos.
Sin embargo, la acción ha provocado disparidad de opiniones en la calle. Paco Gaya piensa que es “total y absolutamente innecesaria”. “No hay gordofobia. Además en España no está el panorama como para asumir este tipo de gastos”, señala el jóven sobre una acción cuyo coste asciende a 84.500 euros.
Desde el Instituto de las Mujeres, organismo al frente de la campaña, defienden la acción. “Hay muchas mujeres que vivimos con miedo de ir a la playa o enseñar nuestro cuerpo”, asegura su directora Mª Antonia Morillas. “Es en verano cuando las discriminaciones corporales y la violencia estética se viven de manera más acusada”, añade.
La directora del Instituto cuenta que como sociedad estamos acostumbrados a campañas de publicidad que muestran modelos y replican estereotipos de género. La que han lanzado desde el Ministerio de Igualdad es una contracampaña para mostrar que existen otro tipo de figuras.
“Hay un problema profundo de gordofobia, de odio, de cuestionamiento de los cuerpos no normativos. Esto se traduce en una vulneración de derechos en el momento en que a las mujeres se nos destruye la autoestima y nos dicen que nuestro cuerpo no es válido”, señala Morillas.
Además asegura que ese cuestionamiento del cuerpo y de la estética tiene una implicación en la salud de las mujeres ya que en muchos casos deriva en trastornos alimentarios y problemas de salud mental. “Es necesario nombrar la violencia estética para que entre en el debate público”.
¿Hombres y mujeres trans?
¿Dónde están los hombres en la imagen? ¿Los hombres no sufren violencia estética? Estas preguntas han inundado las redes sociales cuyos usuarios se han planteado si se debería de ampliar la campaña para incluir a ambos géneros.
“La discriminacion corporal afecta a todos los casos, pero opera de manera más acusada en el caso de las mujeres porque está atravesada por estereotipos de género”, sostiene Morillas.
Otro de los grandes ausentes en la imagen es el colectivo transexual, algo que no ha pasado desapercibido entre los españoles. Desde el Instituto de las Mujeres señalan que la campaña también está dirigida a las mujeres trans aunque tendrán que incluirlas en otras partes de la campaña.
“Forman parte de esto, por eso tendrán más acciones, y así podremos mejorar para que se sientan reconocidas porque la campaña también es para ellas”, apunta la directora.
Estallido en las redes sociales
Son varios los dirigentes políticos que han decidido compartir su opinión. Una de las más sonadas ha sido la de Cayo Lara, el exdirigente de Izquierda Unida, escribía en su cuenta de Twitter que era "el colmo del absurdo. Pretender crear un problema donde no existe".
Desde el Instituto de las Mujeres aseguran que "este tipo de comentarios pone de manifiesto cómo de necesaria es esta campaña y que está cumpliendo su objetivo que era contribuir al debate público y generarlo".
"Las mujeres gordas encuentran discriminaciones para encontrar trabajo, para tener relaciones, conviven con la censura y la estigmatización", dice Morillas.
Por su parte, Ángela Rodríguez Pam, Secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, tambén compartía su opinión en un mensaje en Twitter dirigido a los hombres que creen que las mujeres no necesitaban del permiso del ministerio para ir a la playa:
"Señores diciendo que las gordas ya podíamos ir a la playa sin permiso de Igualdad. Claro que vamos pero asumiendo odio por enseñar un cuerpo que no es normativo".
"Me gustaría quedarme con los mensajes de centenares de mujeres que nos han felicitado y se han sentido reconocidas en esta campaña", zanja la directora del Instituto.