BAGDAD, 10 ago - El poderoso clérigo musulmán chií Moqtada al-Sadr pidió el miércoles al poder judicial de Irak que disuelva el Parlamento a finales de la próxima semana, amenazando con consecuencias poco concretas si no hace lo que él dice.
El líder populista ha contribuido a avivar las tensiones en Irak durante las dos últimas semanas al ordenar a miles de seguidores que asalten y ocupen el Parlamento, impidiendo la formación de un gobierno casi 10 meses después de las elecciones.
Sus opositores políticos, en su mayoría chiíes respaldados por Irán, se han negado a acceder a las exigencias de Sadr, lo que hace temer nuevos disturbios y violencia en Irak.
El poder judicial "debe disolver el Parlamento a finales de la próxima semana (...) si no, los revolucionarios adoptarán otra postura", dijo Sadr en un comunicado en su cuenta de Twitter, sin dar más detalles.
Sadr ha pedido elecciones anticipadas y cambios no especificados en la Constitución tras retirar a sus legisladores del Parlamento en junio.
La retirada fue una protesta por su incapacidad para formar un gobierno a pesar de tener casi una cuarta parte del Parlamento y contar con suficientes aliados para constituir más de la mitad de la cámara.
Sadr culpa a los partidos alineados con Irán del fracaso en la formación de gobierno y los acusa de corrupción, pero sus seguidores también controlan algunos de los departamentos gubernamentales peor gestionados.