Un peligroso reto superado. Alexis ha escalado la fachada de 122 metros con sus propias manos y sin arnés de seguridad. Una disciplina arriesgada, pero que le apasiona desde muy joven.
Alexis Landot trepa por los rascacielos como el hombre araña. "Me pongo esparadrapo en los dedos, mis pies de gato y con mi bolsa de magnesio ya estoy listo para escalar", dice Alexis, especialista e la disciplina de parkour.
Escalada libre a pulso y sin arnés
En la Puerta de Bagnolet, en París, Alexis observa las Torres Mercuriales... Una ascensión de 122 metros de altura a pulso, con una fachada de cristal.
"Hay 34 pisos pequeños y 34 grandes. En cada piso pequeño hay que hacer un movimiento de pies, y en cada piso grande, tres o cuatro. Es una ascensión relativamente corta pero muy dura y muy intensa. Creo que es el reto más difícil que me he propuesto hasta ahora", asegura Alexis.
Una pasión desde niño
Un peligroso reto superado. Alexis ha escalado la fachada de 122 metros con sus propias manos y sin arnés de seguridad. Una disciplina arriesgada, pero que le apasiona desde muy joven.
"Cuando era niño me gustaba "Misión Imposible". Quería ser un agente secreto y hacer locuras en un entorno urbano. Así fue como descubrí el free solo de escalada extrema sin cuerda, que es algo que me encanta. Y aunque parezca paradójico escalar sin cuerda me hace sentir increíble, porque solo yo tengo el control", cuenta Landot.
Alain Robert, una referencia
El especialista de esta disciplina es Alain Robert, un spiderman francés de 58 años que ha escalado los rascacielos más altos del mundo, como la Torre Glòries de Barcelona en 2020.
Alexis Landot sueña con seguir el mismo camino y hacer de la escalada extrema su profesión. a pesar de que es una práctica ilegal...