El diario Le Monde afirmaba que los hidrocarburos de Termokarstovoye servían para fabricar queroseno que iba a suministrar a aviones de combate rusos.
TotalEnergies tira la toalla en su batalla por sus intereses gasísticos en Rusia.
El gigante energético francés ha decidido ceder a su socio ruso Novatek su participación en un yacimiento de gas en Termokarstovoye, Siberia.
La empresa francesa, quinto grupo petrolífero mundial, anunciaba la venta de su participación del 49 por ciento en la empresa Terneftegaz a Novatek, dueño del 51 por ciento restante. El traspaso se hará efectivo en septiembre.
Y es que la polémica estaba servida después de saberse que el gas extraído de dicho yacimiento era utilizado para abastacer a los aviones de combate rusos que hoy por hoy bombardean Ucrania.
La información la publicaba el diario francés Le Monde. Concretamente, Le Monde afirmaba que los hidrocarburos de Termokarstovoye servían para fabricar queroseno, que en parte iba a suministrar las bases aéreas rusas de Morozovskaïa y Malchevo, donde hay cazas que han bombardeado Ucrania.
TotalEnergies, anteriormente Total, negaba en un primer momento la veracidad de dicha información, respaldada por las oenegés Global Witness y Human Rights Watch. El gigante francés llegaba a amenazar incluso con acciones legales, si bien finalmente ha terminado por tratar de desmarcarse de este controvertido asunto.
En paralelo, TotalEnergies ha anunciado estos meses la suspensión de sus actividades en Rusia que no contribuyen al aprovisionamiento de Europa. Eso incluye la producción de petróleo (el permiso de Kharyaga) y la extracción de gas destinado al mercado local ruso, así como el resto de negocios locales (lubrificantes y baterías), que ha congelado en el primer semestre del año.