Trabajaba en estudios sobre el Ártico en la ciudad de Tromso. Se identificaba como José Assis Giammaria, de 37 años, natural de Brasil. El fiscal cree que su nombre real es Mijail Mikushin.
PUBLICIDADSe identificaba como José Assis Giammaria, de 37 años, natural de Brasil. El fiscal cree que su nombre real es Mijail Mikushin. Trabajaba en estudios sobre el Ártico en la ciudad de Tromso.
Está detenido desde hace un mes y no va a recurrir la decisión judicial.
En la Universidad Ártica de Noruega, en Tromso, sorpesa de profesores y del rector.
Marc Lanteigne, profesor: "Ha sido realmente difícil. Ha sido un shock para muchos. Definitivamente no nos lo esperábamos, así que aún estamos tratando de procesarlo".
Dag Rune Olsen, rector: "Se trataba de un investigador comprometido que se integraba bien en el ambiente y era agradable y sociable".
El abogado del supuesto espía,Thomas Hansen, niega la acusación:"Lo está pasando mal. Está profundamente conmocionado. Tiene muy claro que no es un espía ruso. Y aunque ahora ha decidido no apelar la decisión del tribunal de distrito, tiene muy claro que no lo entiende".
El diario noruego Verdens Gang informó por primera vez el jueves de que el profesor asistió a un seminario del 29 al 30 de septiembre en Lituania sobre la lucha contra las amenazas híbridas.
El seminario fue organizado por EU-HYBNET, una red europea sobre amenazas híbridas, un concepto que incluye el sabotaje, la desinformación, los ciberataques y otros medios de lucha al margen de los conflictos militares tradicionales entre Estados.
Noruega y otros países de Europa se apresuran a asegurar las infraestructuras críticas tras el sabotaje de los gasoductos Nord Stream.
En los últimos meses, se han producido múltiples avistamientos de drones en los yacimientos de petróleo y gas en alta mar de y en los aeropuertos noruegos.
El sector del petróleo y el gas es el núcleo de la economía noruega.
Desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania, el país se ha convertido en un proveedor esencial para Europa.