Las protestas de estos días coinciden con el tercer aniversario del conocido como Noviembre Sagriento, cuando 300 manifestantes murieron durante las manifestaciones contra la subida de los precios del combustible.
No cesan las manifestaciones contra el régimen iraní que reprime con violencia las protestas que desde hace dos meses inundan las calles. Unas protestas que desató la muerte de la joven Masha Amini, fallecida bajo custodia policial, tras ser detenida por llevar mal puesto el hiyab.
En estas últimas horas habrían muerto una decena de personas en diferentes puntos del país, que elevan a al menos 342 personas las víctimas mortales durante estos dos meses de movilizaciones, según la oenegé Iran Human Rights, con sede en Oslo (Noruega).
Además, son miles los arrestados, y algunos han sido condenados a muerte.
Las protestas de estos días coinciden con el tercer aniversario del conocido como Noviembre Sagriento, cuando 300 manifestantes murieron durante las manifestaciones contra la subida de los precios del combustible.