19 de los muertos son presuntos delincuentes y los otros 10 muertos son militares, según las autoridades.
Mortífera detención de Ovidio Guzmán en México, conocido como el ''Ratón'' e hijo de otro narcotraficante encarcelado, el ''Chapo'' Guzmán. Al menos 29 personas han muerto durante la ofensiva que desató el cartel de Sinaloa en Culiacán para rescatar a su jefe. En la operación murieron 10 militares y 35 de ellos resultaron heridos de bala. Pero también hubo muertos en el otro bando.
"Las autoridades contabilizaron 19 fallecidos por parte de los transgresores de la ley. Asimismo se detuvieron a 21 personas integrantes de este grupo delictivo", destacaba el ministro de Defensa de México, Luis Cresencio Sandoval.
En la operación participaron cerca de 4500 efectivos. Tuvieron que retirar decenas de vehículos robados e incendiados a lo largo de la ciudad de 800 000 habitantes en cuyas calles se ha librado una de la más batallas más feroces. La cual llegó hasta el aeropuerto donde un avión comercial recibió un impacto de bala momentos antes de despegar.
La captura se ha producido antes de la visita de este domingo del presidente de Estados Unidos Joe Biden. El Gobierno ha negado que la detención se haga para congraciar a Biden y ha aclarado que en el operativo no ha participado Washington que ofrecía cinco millones de dólares por el ''Ratón''.
"Actuamos con autonomía, con independencia, sí hay cooperación y la va a seguir habiendo, pero las decisiones las tomamos como gobierno soberano", aseguró la mandatario izquierdista este viernes.
Guzmán, de quien hasta ahora solo se ha visto una imagen barbado y subiendo al helicóptero que lo trasladó a la cárcel, tiene varias cuentas pendientes con la justicia mexicana, por lo que en principio no habría una extradición 'express', según ha dado a entender el gobierno.
La ley mexicana prohíbe exponer públicamente a los procesados.
El líder de los "Chapitos", como se conoce a los herederos del "Chapo" Guzmán, ya había sido detenido el 17 de octubre de 2019 en Culiacán, pero fue liberado por orden de López Obrador en medio de una asonada de la organización criminal.
El mandatario defendió entonces su decisión, afirmando que se evitó un baño de sangre, cuando contingentes militares quedaron rodeados por civiles con armas largas.
López Obrador destacó que esta vez fue "completamente distinta", pues la operación se ejecutó en la periferia y no en pleno centro de Culiacán para no poner en riesgo a la población.
Fundado hace cuatro décadas por el "Chapo", el cártel de Sinaloa es considerado por la agencia antidrogas estadounidense DEA como el principal responsable del tráfico de fentanilo, una droga 50 veces más potente que la heroína y que ha causado numerosas muertes por sobredosis en ese país.