El presidente del Ejecutivo de Musulmanes de Bélgica y el gran rabino de Bruselas han recordado a las víctimas con una ofrenda floral.
El presidente del Ejecutivo de Musulmanes de Bélgica y el gran rabino de Bruselas han recordado este viernes a las víctimas de los atentados del 22 de marzo, con una ofrenda floral en la Plaza de la Bolsa. Otros imanes de distintas mezquitas belgas han querido participar en este acto donde se ha guardado un minuto de silencio.
“Simbolizamos aquí la unión de todas las comunidades religiosas de este país. Queremos enviar un mensaje de que somos un mismo pueblo, indivisible, musulmanes, judíos, cristianos y otros”, ha dicho Salah Echallaoui.
El presidente de la asociación que representa a los musulmanes en Bélgica también ha lamentado que los extremistas “ensucien” el nombre de la religión, ha dicho, algo con lo que ha coincidido el gran rabino de Bruselas.
“Desde aquí, desde la capital de Europa, lanzamos este grito de unidad, de unión entre todos los ciudadanos, todos los demócratas para luchar contra todo lo que pueda desestabilizar nuestras democracias”, ha explicado Albert Guigui.
Ambos han pedido al Gobierno belga más esfuerzos, centrándose especialmente en la educación. La comunidad musulmana ha asegurado que tomará medidas para combartir el radicalismo.