Pero advierte de las consecuencias para los viajeros en caso de no acuerdo. Entre otros, se quedarían sin cobertura sanitaria y sin permiso de conducir
PUBLICIDADBruselas ha propuesto la exención de visados para que los británicos puedan seguir viajando cómodamente a la Unión Europea después de Brexit. Se aplicaría para las estancias cortas de hasta 90 días e implicaría reciprocidad.
Pero al mismo tiempo ha advertido sobre las consecuencias de un no acuerdo: habría más controles fronterizos, no se convalidaría el permiso de conducir, desaparecería la cobertura sanitaria y los pasaportes de los animales de compañía quedarían sin validez.
Desde el pasado viernes las negociaciones se han intensificado porque urge alcanzar un acuerdo si se quiere respetar el calendario. Pero la cuestión de la frontera entre las dos Irlandas sigue bloqueando el proceso.
Por ello la Comisión Europea ha publicado una lista en la que identifican las áreas que sufrirían un mayor impacto en caso de que las negociaciones fracasen. En ella se incluyen los servicios financieros, el traspaso de datos personales y la aplicación de las normas sanitarias y fitosanitarias.