Los eurodiputados quieren saber qué figura exactamente en los contratos que la Comisión Europea está firmando con las empresas farmacéuticas. Les preocupan las cláusulas relativas a la responsabilidad jurídica en caso de que provoquen efectos indeseados.
PUBLICIDADEl Parlamento Europeo ha celebrado un debate en el que han pedido explicaciones a la comisaria europea de Sanidad, Stella Kyrikiades. Quieren saber quién será el responsable en caso de que las vacunas provoquen efectos no deseados, ya que las empresas farmacéuticas han presionado para que los Estados miembros asuman una parte de las compensaciones en caso de pleito.
Quieren estar seguros de que se respeta el marco jurídico europeo. “La Comisión nos dice que no ha introducido cambios en las reglas legales del juego. Y no tengo ninguna razón para dudar de ello. Pero en ese caso, debe hacer públicos los artículos del contrato relativos a este tema porque ofrecería certezas y silenciaría todos los rumores de todos los que dicen que los laboratorios están trabajando muy rápido y quieren estar exentos de cualquier responsabilidad legal en caso de que mañana haya problemas ”, explica Pascal Canfin, eurodiputado francés del grupo liberal Renovar Europa.
Los expertos temen que la falta de transparencia genere falta de confianza entre los ciudadanos. Y algunas cifras son preocupantes. Un 30% de los españoles no quieren recibir la vacuna anti-Covid.
"Estoy convencido de que la transparencia proactiva y directa con los ciudadanos es la única forma para avanzar. Es la única forma para contrarrestar las teorías de la conspiración y las campañas de los anti-vacunas. Es la única forma de garantizar o de aumentar las posibilidades de que el despliegue de estas vacunas sea un éxito", afirma Yanis Natsis, de la Alianza Europea de Salud Pública.
La comisaria de Sanidad insiste en que la seguridad no es negociable, pero defiende la necesidad de mantener el secreto ya que las negociaciones con otras empresas farmacéuticas siguen su curso. Sin embargo, al final de su intervención, se ha comprometido a estudiar las vías legales que le permitirían compartir la información con algunos eurodiputados.
La Eurocámara también ha pedido información sobre el precio de las vacunas y el margen de beneficio que se reservarán las compañías farmacéuticas, dado el importante nivel de financiación pública que han recibido.