Empieza a andar la Fiscalía Europea, que podrá investigar y perseguir delitos en los Estados miembros sin contar con las autoridades nacionales.
PUBLICIDADEste 1 de junio empieza a operar la Fiscalía Europea, un paso importante en la lucha contra la corrupción en la UE. El nuevo organismo, liderado por la exfiscal anticorrupción rumana Laura Codruta Kövesi, podrá investigar y perseguir delitos en los Estados miembros participantes de forma independiente de las autoridades nacionales.
"Hoy hemos registrado los primeros casos que pertenecen a Alemania y a Italia. Después de esto, nuestros fiscales europeos delegados continuarán sus investigaciones. Así que estamos listos para investigar los delitos que caen bajo la jurisdicción de la Fiscalía Europea", ha asegurado Kövesi a Euronews.
Pero la configuración de la organización no está completa, ya que el gobierno euroescéptico de Eslovenia se ha negado a nombrar a un fiscal delegado para la Fiscalía Europea. Esta es una señal de falta de cooperación, apunta la fiscal jefa Kövesi.
“Es obvio para nosotros que no podremos atender todos los casos de Eslovenia, pero al hacer eso el gobierno esloveno ha puesto a la Fiscalía Europea en una situación muy difícil porque esto significa que no aumentaremos el nivel de protección. Sino que el nivel de protección disminuirá. La Fiscalía no se ha creado para para permitir que nadie ponga los casos eslovenos a la cola", insiste Kövesi.
Por ahora, Hungría, Irlanda, Polonia, Suecia y Dinamarca han decidido no participar en la Fiscalía Europea. La Comisión Europea les ha pedido que se unan ya que, en los próximos años, los Estados miembros recibirán 1.800 millones de euros para reactivar la economía de la UE.
El comisario europeo de justicia, Didier Reynders, alerta de los riesgos. "Si se avanza mas rápido con más dinero y con flexiblidad, hay más riesgos. Por eso debemos convencerles de que es muy importante proteger el presupuesto de la UE y el presupuesto de la UE es el presupuesto de los contribuyentes", explica Reynders.
La Fiscalía Europea espera investigar al menos 3000 casos en los próximos años.